c i n c o

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El tener sentimientos hacia alguien, que no conoces nada de el es ¿malo?, o ¿bueno?, no lo logro comprender, ni siquiera se que es esta sensación que siento en mis adentros, podría ser cualquier cosa, pero no lo creer que sea amor, en mi vida o lo poco que tengo de vida, no e logrado conseguir el amor o saber el significado de tal cosa, pero dicen que amor lo encuentras en las cosas mas sencillas hacia una persona, o algo que hagan. En mi caso la sonrisa de la persona que va conduciendo a mi lado, había sido lo mas especial que alguien había hecho por mi, su sonrisa no la podía explicar, simplemente me había hecho feliz es ese momento, ese poquito de sentimiento que logre sentir no había sido: temor, ira, tristeza, decepcion o enojo, si no, que fue sincero, feliz, era lo mas bonito que alguien había hecho por mi. 

Mi mirada iba de su rostros a sus ojos y boca, la cual era de un color rojizo , era un ser tan hermoso, tan incomparable con otra cosa, esa cosa o persona es, el señor jungkook.

-Me vas a desgastar- sus palabras habían sido la bomba que detono en mi cabeza, haciendo reaccionar, y alejar mi mirada de el para ahora ver el paisaje de la ventana del copiloto, en donde yo estoy sentada

Las personas que nos iban siguiendo ahora ya las habíamos  perdido, gracias a las maniobras de ahora mi acompañante el en auto, el ambiente era tranquilo, pero para mi era de lo mas incomodo, quiero hacer del baño, la falda que llevo puesta me queda muy corta y hace que mis muslos se vean mas de lo normal, mi pelo es un desastre. Me debo de ver fatal ya que gracias a las bolsas de ojeras que se formaban debajo de mis ojos, gracia a que no e podido dormir desde que mis papas me vendieron al bar donde, actualmente ya no mas de esos trabajos sucios que me hacían hacer.

-¿En que piensas pequeña tomatito?- ¿tomatito?, me  llamo tomatito, no se que me paso pero mis pequeñas y delicadas mejillas pálidas como la nieve, se habían teñido de un color rojizo, lo que al ser pálida de piel hacían que me viera como un tomate, rápidamente agarre mis  mejillas y las cubrí con mis manos.

-En na-nada- baje mi cabeza, ahora si había quedado frente a el como una estúpida.

-Me encanto lo que hiciste hace rato- ahora si que estoy roja, le había gustada lo que yo, osea, yo , Eun yang mi, le gusto lo que hice a un chico, no sabia en que me momento me viene el paro cardíaco pero de que viene viene.

-G-gracias- trate de poner un tono serio, relajarme, pero como relajarme frente a alguien como el aquí, a mi lado, era casi imposible.-¿adonde vamos señor jungkook?- mi pregunta me asusta por su respuesta, ¿adonde me llevaría? no lo se, pero de una cosa si estoy segura, es que si vuelve a sonreír de esa manera, yo iré con el a donde sea.

-No me llames señor, soy mayor que tu pero no tanto como para ser un señor- mordí mi labio inferior tratando de esperar su respuesta, pero el solo la evadió con una respuesta algo indiferente, por su tono de voz me paresia que otra vez estaba molesto.- y a tu pregunta... vamos a mi casa o bueno ahora tuya también-  o no, otra vez me sonrió, pero que le pasa, no puede jugar así con mis sentimientos, me volverá loca si sigue de esa forma.

-Oh...- solté un suspiro que no tenia por que ir en nuestra platica, que estúpida, pero el daño ya esta hecho, pero que mierda, desde cuando me importa esto, es solo una estúpida platica de personas o bueno yo una persona y el un dios.

-¿Desilusionada?- bien y la cague 

-No... es solo... que.. ¿puedo preguntarle algo?- necesito saber mas de el,¿ quien es? ,¿a que se dedica?, ¿por que me compro? y ¿para que?, me da miedo saber cual sera su respuesta.

-Ya lo hiciste- otra vez me evadió como un campion, el tema de aquí era el por que es así, solo quería que nos llevemos bien y el marcaba la raya que nos separan, mundos completamente diferentes, el con dinero y alguien tan bello como el diamante mejor pulido de un desierto, y yo, pues era yo, no se en que se fijo en mi, mi piel mas pálida que un enfermo, ojos bueno mis ojos eran grises negros, mi papa me decía que era de un color negro muerte y que tendría que estar muerta como aquel color tan feo para el, mis ojos eran mas grandes de lo normal a una coreana  normal, yo soy rara, y lo rara para los demás no sale a frote, mi cabello, de color café y lacio, según los clientes del bar mis curvas eran de locura, si tenia buenos pechos pero no era para tanto eso cualquiera lo tiene, hay mejores que yo, palabra de mi hermanastro, mi cuerpo mas pequeño de lo normal  para una chica de 16 años, mido aproximadamente 1,55, soy un gnomo, mis labios son finos, había visto en intagram chicas con labios hermosos y yo, pues era mierda, como todos me lo hacían recordar, en mis mejillas tengo  pecas de un color chocolate crema, pero siempre los cubría con maquillaje, ya que el jefe del bar me dijo que con eso no atraería clientes al bar, me hacen lucir tonta, yo soy tonta. Mi mirada estaba puesta en el piso de auto, yo no pedí esta vida, yo jamas fui mala, porque dios me tenia que castigar con una vida así.

«My innocent little girl» - J.Jk -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora