Sweet Love Of Mine.

¿por qué hiciste eso?

Luego de aquel vergonzoso momento, los chicos se dirigieron a sus clases, todo en perfecto estado y tranquilidad, ambos conversaban con sus compañeros y reían ya que eran las últimas semanas de clases y eso los relajaba mucho.

Sonó el timbre para el término de las clases de ese día, cada alumno se despidió de sus pares y tomaron sus mochilas hasta dirigirse a la salida. Brian emprendió su camino hacia la sala de música junto a su guitarra normal, su Red Special la había dejado guardada en su casillero anteriormente. Roger logró divisar al rizado entrar por lo que siguió a éste y comenzó a espiar su práctica aprovechando que John se había ido a su hogar.

Narra Brian.

Después de clases, quise ir a la sala de música a practicar con mi guitarra en paz, en verdad me avergüenza mostrar mis prácticas, imagínense si Roger me ve practicando. Mi rostro se transformaría en un volcán, estaría ardiendo allí mismo.

En fin, tomé asiento tranquilamente ya que no había nadie y entoné una melodía dulce y lenta acompañada de unos tarareos que producía a la vez mi boca.

Luego de un rato entonando la misma melodía y que tan sólo me haya salido una vez, me hizo sentir avergonzado conmigo mismo. Pero pensé en Roger y cómo estaría viéndome extrañado al no poder tocar bien esto sabiendo que soy el mejor de la universidad en guitarra y la canción comenzó a salir por su cuenta, fluida y suave.

A mis oídos era perfecta, me emocioné muchísimo al saber que ya me había resultado por fin, por lo que eso significaba que me podía ir después de todo, guardé mi guitarra en su estuche y tomé mi mochila mientras me dirigía a la salida, antes de eso, escuché un sonido un tanto extraño por lo que me asusté, con más rapidez salí de allí y vi a... Roger.

Narra Roger.

Vi como Brian practicaba junto a su guitarra, fue tan lindo verlo equivocarse una y otra vez, su carita de decepción era tan hermosa, pero yo seguía con la esperanza de que le saldría al fin.

Cuando mis oídos y mis ojos deleitaron la melodía que por fin había logrado entonar, sonreí sorprendentemente al mismo tiempo que él y me emocioné, probablemente más que el cuando la melodía le resultó.

Al momento de ver que estaba tomando sus cosas para irse, mi corazón se aceleró y comencé a pensar en una manera de salir de allí, se había alarmado al parecer por un sonido que mi pie hizo, maldito idiota seré.

En el mismo instante en el cual se dirigió a la salida yo trataba de salir, pero ya había visto mis rubios cabellos y mis pantalones negros. Juro que haberme metido allí fue la peor decisión que hice.

—¡¿R-ROGER?!— pude ver como sus bellos orbes color hazel me miraban exaltados y totalmente sorprendidos. —¿¡QUÉ HACES A-AQUÍ?!

—V-verás Brian... eh, yo...— sentí mi corazón paralizarse al chocar miradas con él, de hecho, mi cuerpo completo se había paralizado. Le di una excusa demasiado idiota para este caso. —estaba buscando una c-cosa que se me había quedado.—

—R-Roger, en la sala no hay nada, hoy se llevaron las cosas para el teatro, mañana hay un acto y t-tengo que tocar allí.— me sorprendió con aquel dato, yo iría a verlo ya que me habían obligado, pero ya que Brian va, no sería mala idea ir bien presentado y obviamente bien limpio.

—Brian... ¿te digo la verdad? Te estaba viendo a ti.— fue la mayor estupidez que pude responder, ¿QUÉ MIERDA ME PASA?