Capítulo 3.

192 10 1
                                    

Narra Miriam.

Cuando acabé mi turno fui a mi casa a prepararme para la misión de esta noche. La veía un poco absurda pero bueno, me apetecía salir de fiesta ¿por qué no? A ver a ver, céntrate Miriam. Vas ha hacer una misión, tienes que buscar sospechosos, pero claro a la vez tengo que divertirme para que no se me vea mucho el plumero. Ay no sé. Bueno voy a vestirme.

Opté por una chaqueta dorada, una camiseta negra y unos vaqueros también negros. En el pelo decidí dejármelo suelto pero con un pequeño moño arriba.

Quedé con mis compañeros en que ellos me recogían a las 23:00, son ya las 23:14 y todavía no están aquí, sé que soy una exagerada pero es que yo soy muy puntual. De estas que están esperando a que sea la hora montada en el coche esperando a que salgas y si es la hora y aún no has llegado me piro. Bueno creo que me habéis entendido.

(Suena el timbre)

Hombre por fin han llegado. Está bien, manos a la obra. Pero diviértete también, Miriam no te olvides de que hay que disimular también.

-Hombre por fin chicos. Joder eso de la puntualidad no lo lleváis muy bien eh. -dije yo.

-Lo sentimos Miriam de verdad. La próxima vez no pasará. -se disculpó Raoul.

-Pff, espero que no haya próxima vez. -murmuré.

-¿Dijiste algo? -preguntó Agoney.

-¿Eh? Ah, no, no, nada.

Agoney se encogió de hombros y miró hacia enfrente. 

-Qué guapa vas, Miriam. -me dice de repente Nerea.

-Gracias. -contesto un poco sonrojada.

Llegamos al local. Era el típico pub con luces LED de colores y todo muy oscuro. Entramos al local. Sólo estaba iluminado por los focos de colores, la música estaba muy fuerte, había una pista de baile que estaba llena de gente perreando, a la izquierda estaba la barra también super petada y los camareros como locos.

Narra Ana.

La barra estaba llena, pero yo tuve tiempo de fijarme en cuatro chicos bastante guapos, sobre todo, una chica rubia y alta con cuerpazo. A esa le entro yo esta noche, si es que tengo tiempo.

La barra se fue vaciando, menos mal. Porque le tenía el ojo echado a la rubia desde que entró por la puerta. No se qué me pasa que no paro de mirarla.

-Ana, ¿qué te pasa? -dijo Aitana sacándome de mis pensamientos.

-¿Eh? nada sólo estaba mirando a esos cuatro de ahí, son verdaderamente guapos los cuatro.

-Ya, a mí no me dan muy buena espina eh, tienen cara de policías, así que mejor quítate a la rubia de la cabeza anda.

-Mira que lista la niña. Vamos, ¿quién te gusta? -le dije dándole pequeños codazos.

-¡¿Pero qué dices loca?! Yo no me voy fijando en el o la primera persona a la que veo.

-Anda pero si tú tampoco podías parar de mirar a la chica más pequeña.

-¡¿PERO QUÉ DICES?!

-Venga ya Aitana, si sabes perfectamente que a mi no me puedes mentir.

-Ay que pesada. Mira, ahí viene tu crush. -me dijo señalando al frente con la barbilla.

Mierda. Ahí viene. ¿Y ahora yo qué hago? Bueno Ana, tú actúa normal.

Narra Miriam.

Pff qué aburrido es esto. Agoney y Raoul se han ido a la pista de baile y no paran de bailar pegados. Y yo, pues aquí sentada como una mujer mayor. Nerea está conmigo, a la pobre chica la tendré más aburrida... Pero estoy centrada en la misión, de hecho creo que soy la única que está centrada en la misión. Me he cansado, voy a por unas copas que ya es hora y por lo menos estoy haciendo algo productivo en una fiesta y no estar aquí mirando descaradamente a las personas. Aun que desde que he llegado noto como una mirada fija en mí pero no logro saber de quién es esa mirada. Giro mi cabeza hacia la derecha y me veo a una camarera mirándome fijamente. Ajam... así que eras tú. De repente se le une una chica más joven y empiezan a hablar mirándome, vale creo que están hablando de mí. Bueno voy a por una copa, bueno, y también a divertirme un rato...

BATWOMAN (WARIAM)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora