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          Se volvió la presidenta de la clase, la gran mayoría estaba feliz por ella, pero, desde ese día muchos comenzaron a pedirle ayuda.

          Lizzy estaba acostumbrada a trabajar y ayudar a cierto grupo de personas, las habituales, pero este año ha estado sobrecargada. Muchas veces pensó que sus compañeros de clase solo la buscaban por interés, pero cuando las lágrimas estaban a punto de salir esfumaba ese pensamiento y se ponía a leer.

- oh, pero pregúntale a Lizzy, demás que te explica, yo no entiendo esto.

- que le voy a preguntar a esa, si ni siquiera contesta los WhatsApp

- ¿no crees qué estás exagerando?

- no, si es más pesada.

           Cuando terminó de escuchar la conversación se dirigió presurosa a la sala de una profesora en particular, faltaba una hora para irse y necesitaba desahogarse.

          Cuando llegó fue recibida por una sonrisa, intento devolverla, pero solo salió una mueca, seguida de muchas lágrimas, confort y algunas correcciones para su persona de parte de la profesora, al igual que algunos abrazos.

           Al llegar a su casa tuvo que contarle a su mamá que pasaba, pues justo cuando llegó su madre estaba comiendo, y la vio con los ojos rojos y llorosos.

          Ese día no reviso su celular...

Sentimientos Encontrados - LGTBQ+ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora