Mas Allá Del Universo

ESCENA RELIGIÓN CIENTÍFICA

(Todos están sentados en la larga mesa y es el líder quién habla y quién capta la atención de todos)

Líder: El vino y se hizo hombre, realizó milagros, milagros reales no magia, no ilusionismo, todo fue verdad. Él fue Jesús, un hecho reconocido por la gran mayoría de iglesias o sectas, o al menos cada una de ellas tiene su propio Jesús. Jesús dijo "ustedes podrán hacer lo que yo he hecho y más. La Fé es como un grano de mostaza, un grano de mostaza es milimétrico, pero su árbol, es tres billones de veces su materia primera. ¿¡Se imaginan entonces!? La Fé es capaz de mover una montaña, es capaz de pensar que podemos llegar de donde el vino, de su propia creación eterna, el hombre, creado a su imagen y semejanza, no igual a él pero semejante. "Una mente creadora". Él la dejo, para que llegáramos a él, ese es el gran plan, llegar a él. Jesús está, según la biblia, en cuerpo y alma en el universo con Dios, la biblia lo dice y yo solo lo repito. Estoy seguro, que el hombre llegará al padre para contarle lo que estamos viviendo y suplicar su ayuda. Es por eso que nuestras fortunas se han unido para lograr lo inimaginable.

(Uno de los miembros el más anciano dice de una forma muy misteriosa y casi pausada, como entrando a todos a la historia que contará)

Miembro 2: Así como cuando Jesús entro a la casa de los apóstoles después de su muerte, entró traspasando las paredes, como un fantasma, pero cuando le dijo a Tomas que tocara sus llagas él lo hizo, entonces él ya era materia, ¿cómo lo hizo? Solo en una dimensión distinta.

(Señala por todos los lados lo que menciona)

Líder: Muchos creen que Dios está en el cielo, pero no. Se equivocan él está allí, aquí, en todos lados, fuimos creados a su imagen y semejanza, para cuando muramos podamos formar parte de esa ¡súper energía! que lo hace vivir a él y a nosotros dentro de él.

Miembro 3: ¿El univernauta según los planes deberá regresar a la tierra para contarnos del más allá?

Líder: Si. Quizá ya no lo vean nuestros ojos humanos pero lo perciban nuestros espíritus.