Astrxnauta

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-Ah, Hola Igor, ¿como estás? -dije intentando ser educada sin mostrar ni un pequeño grado de molestia.

-Estoy bien gracias, oye, me preguntaba si querrías salir conmigo esta tarde- me miró fijamente a los ojos- como amigos- especificó.

-¡Tengo planes! -corté la conversación y decidí continuar.

-Perfecto, paso por ti a las 5.

-¿A caso no escuchaste? -exclamé.

-Si, pero a juzgar por tu pesadez puedo deducir que en realidad no tienes planes y como no estás de humor, decidiste ignorarme, cosa que no se te dió - dijo con un tono arrogante -cabe la posibilidad de que te hayas levantado con el pié izquierdo, o simplemente tengas el periodo menstrual - hizo una breve pausa - prefiero optar por lo segundo - concluyó mirándome el trasero.

Sentí la sangre correr por mis mejillas, esto realmente no podría estar pasando, no se que es peor, que me haya manchado o que sea justamente Igor quien lo haya notado.

-No te hagas el listo, puede ser que com otras chicas te funcione tu faceta de chico malo, no me conoces, no soy como las demás. -dije en el mismo tono de arrogancia que él, tratando de evitar su comentario sobre mi pequeño incidente.

-Eso es lo que te hace interesante.

No pude decir nada porque cuando iba a hacerlo se alejó dejándome con la palabra en la boca ¿Que rayos le pasa?  Fué lo único que pasó por mi cabeza en ese momento, no puede hacerme perder el autocontrol cada cuando quiera.

Se dirigió a una moto y tomó la  chaqueta que estaba escima de esta y por lo visto él la  había puesto.

-¡Toma! -me dio la chaqueta e inmediatamente me la coloqué cubriendo una parte de mi espalda baja en donde era notoria una gran mancha roja.

- Genial, ahora eres amable -dije con mi más alto grado de sarcasmo.

-Con un gracias era suficiente.

Rode los ojos mientras lo veía dirigirse nuevamente a su moto.

-Ven, te llevo a casa -exclamó mientras sostenía uno de los cascos en la mano, la cuál estaba estirada hacia mi - o ¿acaso te da miedo? -exclamó con una sonrisa arrogante.

- ¿Eres consciente de que no caeré en tus chantajes?, además no me subiré en esa cosa. -dije mientras señalaba la moto con mi dedo índice.

-Sabía que tenías miedo, además no te creas, no dejaría que una bolita fresa se subiera en octavia.

-¿Octavia? -exclamé seguido de una carcajada -que clase de persona nombra una moto.

-Alguien con suficiente intelecto como para ganar un campeonato con la misma moto por más de 4 años seguidos.

-Egocéntrico.

-Experpenta.

-Analfabeto.

-Pedante.

-Ño..

- ¿Es una competencia de quien diga palabras más extrañas? -preguntó Cass, sobresaltandonos a ambos.

-Hola Cass, vine a visitarte, quería comentarte sobre algo.

-¿Qué? ¿planeando hacer una orgía o algo parecido?

-Creo que la droga te está haciendo efecto. -dijo Igor con una sonrisa en la cara.

-¡Oh! reparaste a octavia. -exclamó Cass mirando la moto con cara de sorpresa.

- Si, ya la terminé.

-Y... ¿piensas volver a competir?- luego de el comentario de Cass, se produjo un largo e incómodo silencio, no tengo idea a que se debe eso.

-Creo que debo ir a casa -dije mientras miraba la hora en mi reloj, tengo que preparar varias cosas para presentar mi tesis en la escuela.

-No hay problema, ¿Nos vemos esta noche?

- Si, claro, me comunicaré con "tu amigo" a ver si viene -me encargué de resaltar bien las comillas, se que Tom y Cass se traen algo... Si tengo que hacer mi papel de cupido no dudaré en hacerlo.

-Oh, ¿Tom vendrá?, no hay problema, mientras más mejor, t¿e nos unes Igor?

-Creo que mejor paso, tengo trabajo que hacer - su mirada se tornó obscura, eso ya era algo común en el, muy en el fondo se que esconde algo, aunque la mayoría de las personas lo ignoren yo no, tengo que saber que es.

Caminé de regreso a casa, me bañé y cambiéde ropa.

Me dirigí hasta el sótano, quería investigar más cosas sobre la abuela, no la conocí, pero, en si,  tengo dudas sobre si el diario es realmente de ella, lleve el diario conmigo.

Encontré una caja en donde se supone se encontraban varios álbumes de fotos, comencé a buscar y saqué uno de ellos.

En la primera página había una fotografía de un señor (mi abuelo) estaba en frente de una casa, era pequeña, el piso a lo lejos se podía ver que era de madera, a su lado se encontraba otro señor, más o menos de la misma edad que mi abuelo, este vestía un traje de militar.

Adelanté la página y vi una foto de mi abuela sentada en una mecedora, había una chica que estaba de espalda, ésta vestía de blanco, no se le podía ver el rostro.

Luego de usmear por un rato, encontré un álbum que estaba lleno de polvo, lo que me causó estornudar varias veces, salí del polvoriento lugar y me dirigí a mi cama con el álbum en la mano, las 1ras páginas tenían fotos de mi padre cuando era pequeño, sin embargo habían varias horas vacías.

Adelanté la hoja y vi otra foto de mi abuela con una chica, que estoy segura que era la que  había visto en una de las fotos, ya que, vestía de la misma manera que en la de antes.

En la foto se encontraba mi abuela con un vaso de vino en la mano sentada en una pequeña habitación, sin embargo, la chica la miraba mientras sonreía, era hermosa, aunque no podía afirmar nada, ya que, no se le podía ver con claridad su cara.

- Estoy segura de que la he visto antes -Murmuré para mis adentros.

Seguí viendo mas fotos y me detuve al ver una foto cortada a la mitad donde se veía una parte de la cara de mi abuela, mi abuelo y una pequeña silueta de una tercera persona, a juzgar por la forma marcada en la sombra, puedo deducir que es una mujer.

¿Pero quien? ¿Y por qué está rota justo por la mitad?

Mi teléfono me sobresaltó,  me estaba entrando una llamada.

Contesté seguido sin siquiera ver el número.

-Tienes que detenerte, ella te va a hacer daño si sigues. - era la voz de una chica, quien se escuchaba muy asustada.

-¿Quien eres?

Se escuchó un grito detrás de la llamada y la llamada simplemente se cerró.

{...}