CAPÍTULO 3

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Damion hurgaba en el bolsillo buscando las llaves para abrir el portal de su casa. Famous esperaba impaciente al lado, con los brazos cruzados, mostrándose incómodo debido al frío de la calle. Eran las seis y pico, había anochecido ya y las últimas calles por las que habían caminado hasta llegar allí estaban medio desiertas.

Lo habían pasado muy bien. Damion le había enseñado a su colega varias calles más del centro y muchos monumentos. Luego pasearon por el Parque del Retiro, y Damion se descalzó y se subió a un árbol para que le sacasen una foto. Al bajar, casi se rompió una pierna y quedó tirado en el suelo. Famous, muy alarmado por su chaval, guardó el móvil y corrió junto a él para comprobar que estaba bien. Damion le repitió mil veces que lo estaba, pero el otro chico se puso a llorar del susto y Damion tuvo que abrazarlo varias veces para que se calmara.

Después, alquilaron una barca en el estanque del parque y remaron tranquilamente, no sin antes Damion haber comprado un algodón de azúcar en un puesto cercano que los dos degustaron sentados en un banco, mientras Famous le agarraba del hombro y le hacía carantoñas en la espalda. Los chicos no recordaban un día más feliz en sus vidas.

— Por fin —dijo Damion, metiendo una llave en la cerradura.

Los chicos subieron el ascensor en silencio hasta la cuarta planta. Una vez estaban dentro del piso, Damion invitó a su acompañante a tomar asiento en el sofá del salón.

— Siéntate, y relájate mientras preparo algo para merendar. Si quieres, podemos salir a cenar más tarde. Soraya no volverá hasta las nueve. Si necesitas algo, llámame, estoy en la cocina —explicó el anfitrión.

Nada más entrar al piso, había un vestíbulo que conectaba con el salón directamente, y a un lado un corredor que daba a las dos habitaciones (una convertida en el estudio de Damion) y al baño. El salón era la estancia más grande de la casa, pero la iluminación era escasa. Famous observó el lugar que le rodeaba.

A su izquierda, había un sofá, y en medio, otro más pequeño con unas mantas, y una mesa para el café de madera y cristal, sobre la que había trastos varios. En frente, se situaba un televisor y un mueble con una videoconsola y varios discos de películas y videojuegos. También había una cadena musical y varios CDs de grupos de rock. A su derecha, estaba el balcón que daba a la calle, y detrás una estantería con libros y varios marcos con fotos en los que salían Damion y Soraya en diferentes ocasiones.

Famous se acercó y cogió uno de ellos. La foto mostraba una tarde cálida de verano, en una playa, con un Damion con el torso desnudo y una Soraya con un bikini que le quedaba tremendamente bien. Los dos estaban sentados en una toalla, y Soraya mostraba su habitual sonrisa (esa que había visto demasiadas veces en su perfil de Instagram), mientras que Damion aparecía con una expresión neutra, pero que irradiaba felicidad.

— Famous, ¿quieres que te lleve unos polvorones? —preguntó el otro chico desde la cocina.

— Si, bueno... vale —respondió.

Famous se sentó en el sofá grande y esperó a su amigo. Damion era un chico guapo. No "guapo en plan, bueno, de modelo de revista", pensó, sino "guapo y real". Los modelos tienden a una belleza demasiado perfecta, irreal en el día a día, al menos en la mayoría de los casos. Damion era una persona de una belleza "realista", que pertenecía a este mundo. Y además, tenía un corazón enorme.

El chico negro no podía parar de pensar en todo lo que había hecho Damion por él. Desde que lo había conocido en los castings de OT, siempre le había parecido un chaval adorable, y cuando cantó Déjala que baile junto a él (canción que odiaba y ahora amaba), todavía más.

Algunas veces, le parecía ver a una persona extraña, con conductas "propias de un macho alemán hetero con amigos aún más heteros". Pero otras, le parecía estar tratando con un niño pequeño, que hacía gestos con una ilusión enorme y se reía como la persona más feliz del mundo, que le abrazaba sin cesar y se preocupaba por él. Desde luego, parecían dos personas distintas en un mismo cuerpo.

Madrid (fanfic damious)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora