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Al día siguiente, Logan me llevó temprano a comprar comida suficiente para sobrevivir un par de semanas, justo cuando veníamos de regreso empezó a platicarme acerca de sus días en la universidad, un par de nombres conocidos saltaron a nuestra conversación, hasta que descubrí el nombre de una chica que no conocía en lo absoluto.

Muy bien. Posiblemente hablé demasiado pronto y acabo de ver a todos los espectadores imaginarios de mi película burlarse en mi cara. 

—¿Emily? 

—Oh, sí... la dulce Emily, es mi novia. —Logan sonríe mostrando su estúpida y perfecta dentadura y tengo ganas de golpearlo en la cara, pero no tenía un motivo sólido por el cual hacerlo. —La conocí apenas este semestre y llevamos casi cuatro meses saliendo, es muy linda, probablemente puedas conocerla mañana, Ethan hará una fiesta, supongamos que es para darte la bienvenida. 

—Me imagino que debe ser linda, quiero decir, después de todo... tenías buenos gustos antes... 

—Sí, su rostro es muy lindo, soy la envidia de muchos, además tiene... 

Lo veo hacer un gesto obsceno sobre su pecho, haciendo referencia a.... bueno, no creo que haya necesidad de explicarlo con peras y manzanas. De verdad quiero golpearlo en la cara, ¿cómo se atreve siquiera a mencionarme a su novia tan a la ligera?  Agh. Lo peor es que ni siquiera tengo un motivo válido por el cuál reclamarle. 

—Logan... Cuando la conozca podré... apreciar sus rasgos físicos, no necesito demasiados detalles. 

—Vamos, no seas aburrida. Estoy casi seguro de que, si tuvieras un novio, me dirías el tamaño de... —Volteé a verlo, incrédula. —Bien, me callo, me callo. Pero la verdad me gustaría que se conocieran y se llevaran bien. 

—Oh claro, ¿y qué le digo? ¿Tu novio y yo disfrutábamos de explorar nuestras bocas antes de que me fuera a vivir a California? 

—¿Qué tal "tu novio y yo somos mejores amigos desde la infancia"? Dios, no hace falta que seas tan honesta y detallada... no creo que quieras que yo te espante a tus futuros novios. 

Ja. Como si planeara tenerlos alguna vez, idiota.

—Bien, prometo tener mi mejor comportamiento el día de mañana con tu noviecita, ¿habrá alguien más que conozca en la dichosa fiesta? ¿O me harás sufrir siendo tu mal tercio? 

—La verdad creo que no, todo mundo decidió hacer su vida lejos de este vecindario, algunos vienen de visita de vez en cuando, pero por ahora no hay nadie de nuestro pasado por aquí. 

Ok, entonces seré el mal tercio. Me muero de ganas por ir.
Finjo estar emocionada mientras que Logan me mira fijamente por unos segundos, una vez que voltea a otra parte, me permito relajar mi rostro y demostrar que en verdad odio esta situación.
Logan tiene novia y obviamente no soy yo.

Una vez que hemos terminado de hacer todo lo que necesitaba, regresamos en un silencio un poco incómodo a mi casa. Logan me ayuda a bajar las bolsas con la compra y de paso también a acomodarlas en el refrigerador y la alacena. 

Después, sin siquiera preguntarme nada, toma una de las cervezas que acabo de comprar y se deja caer en el sofá como si viviera aquí desde siempre. Si mi mente estuviera igual de optimista que hace rato, pensaría que parecemos una pareja en un viernes cualquiera, pero lastimosamente no lo éramos y yo no le daría alcohol gratis. Me siento muy cautelosamente a su lado y cuando se concentra en encontrar algo para ver en la televisión, le arrebato la cerveza. 

— ¡Annie! —Lo ignoro por completo y la llevo a mis labios, dándole un par de tragos largos. — Me hubieras dicho que querías una y habría sacado una para ti del refrigerador... ahora tiene tu saliva. 

«Forever?» {Logan Henderson} (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora