Capitulo 3.

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-Vale.-susurre.- Esto no puede ser real.-dije mirando la pantalla de mi móvil. Me eche para atrás, quedando tumbada aun mirando el móvil. “Harry”. Mire su nombre de nuevo.- Todo esto debe de ser un sueño.

-Ya has dicho eso más de mil veces, cállate.-dijo mi amiga seria, tirándome un camiseta de manga corta blanca a la cara.- O si no, no llegaras a tu cita con Harry.- puse los ojos en blanco.

-Que no es una cita.-dije levantándome de la cama y entrando en el cuarto de baño, para darme un ducha. Abrí el grifo del agua para que esta empezara a calentarse, y empecé a quitarme la ropa, cuando Blanca grito mi nombre.

-¡Abril, un mensaje de tu queridísimo Harry!.- con los ojos abiertos como platos, cogí una toalla y me enrolle en ella, para salir como una bala del cuarto de baño.

-Dame eso.-le quite el móvil a mi amiga que lo tenía en las manos.                                     

<<Buenos días. Paso a por ti en media hora, quiero llevarte a comer a un sitio. Hasta luego. Xx >>

-¿Qué te ha dicho? Vaya cara de enamorada tienes, hija.- dijo mi amiga quitándome el móvil de las manos al no contestar.- ¡Te va a llevar a comer! Tienes que vestirte, corre.-dijo cogiendo lo que anteriormente me había tirado a la cara, y dándomelo.- Reacciona.- dijo empujando hacía el cuarto de baño. Me duche y vestí en tiempo record con la ropa que mi amiga me había lanzado.

Aproximadamente en unos quince minutos, estuve ya lista y presentable para Harry me aplaudí a mi misma mentalmente y salí del cuarto de baño, encontrándome con Blanca, también vestida y arreglada. Sonrió y me extendió el bolso, lo cogí y lo coloque sobre mi hombro.

-Faltan diez minutos, creo que debes ir bajando ya.-dijo Blanca mirándome nerviosa, mucho diría.

-La que debería de estar nerviosa, debería de ser yo.- me queje yendo hacía la puerta para abrirla.- Y parece que tu estas más que yo.

-No te engañes amiga, tú estas muchísimo más que yo, lo que pasa es que yo lo demuestro más.-dijo cerrando la puerta de la habitación y caminando hacía el ascensor, en el cual subimos enseguida.- Eres tú la que tienes una cita con Harry Styles.

-Y dale, que no es una cita.-salí del ascensor a paso rápido cuando las puertas se abrieron. Camine hacía unos sofás color crema que habían en la acogedora recepción y me senté en uno de ellos, desvié la mirada hacía el sofá de al lado y vi a mi amiga jugando a Candy Crush a mi lado.- ¿Tu qué haces aquí, cotilla?

-Soy fan de One Direction, me considero más una directioner, no puedo quedarme con los brazos cruzados cuando mi mejor amiga tiene una cita con Harry Styles, uno de mis ídolos, y mi segundo amor platónico después de mi irlandés.

-Lo que yo decía, que eres una cotilla.- dije negando con la cabeza y jugando con un hilo que salía de la funda que tenía el sofá. Tararee una canción de la cual no me acuerdo de su nombre, mientras esperaba a que Harry apareciera ya por la puerta. Mire el reloj nerviosa, que había frente a mí y vi que marcaban las doce en punto, en un ágil movimiento mire a la puerta y vi como Harry la empujaba para entrar y una vez dentro, empezó a inspeccionar la sala. Cuando me puse en pie mi amiga me miro, por primera vez quitando la mirada de su móvil y sonrió cuando vio al chico en la misma entrada.

-Tu, quietecita.-dije señalándola acusadamente. Para luego caminar a paso ligero a Harry, mientras ahogaba por séptima vez un grito en lo que llevábamos de día, Dios estaba muy guapo, como siempre, pero verlo en persona en carne y hueso y a escasos metros era algo surrealista.- Buenos días señorito Styles.- se giro y me miro con el ceño fruncido.- Hola Harry.- intente arreglarlo. El rio.

Half a Heart [Harry Styles]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora