Día 6 Diario Lucifer (Serie Lucifer)

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¿Para qué le pagaba a Linda las sesiones? ¿Qué clase de terapeuta simplemente le decía "es necesario que encuentres una forma mas saludable de expresar tus problemas...algo que no involucre sexo y alcohol"? ÉL LE DABA LA DEFINICION A LAS PALABRAS SEXO Y ALCOHOL, nunca nadie se había quejado de eso, no se quejaron las Britney's...¡incluso Linda no se había quejado!, golpeó con el bolígrafo la libreta con portada de un unicornio rosa, Lucifer levantó el borde de su labio en una muestra de rechazo "es la ultima vez que hablo con la cría de la detective sobre esto" pensó el caído ignorando toda la palabrería que su psicóloga decía, Linda era una buena amiga pero definitivamente era mejor cuando la paga era sexo y ella le decía justamente lo que quería escuchar.

–Lucifer ¿estas prestando atención? Han pasado semanas desde que te dije que empezaras tu diario...es...un extraño fetiche ¿tal vez? – la mirada de Linda no se despegaba de la portada de aquel curioso diario que su peculiar paciente había colocado sobre su regazo y no paraba de golpear.

–Linda por favor, tu sabes cuales son mis gustos y definitivamente este no es uno de ellos– la sonrisa de Lucifer se hizo grande y juguetona, no podía parar de dedicarle miradas lascivas a su compañera–aunque uno nunca sabe, pero eso lo podríamos descubrir después, lo traje para que lo leyeras y sin ofender pero creo que deberíamos cambiar la forma de la terapia, propongo un masaje con aceite dado por las delicadas manos de un par de asiáticas– por fin le entrego el diario y dejo que se maravillara con lo que él llamaba "mis pequeños pecados". Cruzó sus piernas tomando del interior del saco su inseparable licorera para dar un largo trago, los minutos pasaban y descifrar las expresiones de Linda no era nada fácil.

–Lucifer, te pedí escribieras tu estado de animo y cosas que te costara trabajo contarme...no que volvieses a revivir cada una de tus aventuras en la cama– Linda soltó un suspiro sin despegar la mirada del escrito, porque sí, era la cosa mas excitante que alguna vez hubiera leído.

–Son mis estados de ánimo, al menos los que mas me gustan, ¿crees que podamos publicarlo bajo el nombre "diario de un diablillo"? solo espera a llegar a la parte del triangulo infernal, invención mía claro...también omití tu nombre ya sabes, confidencialidad y todo eso– Levantó su licorera brindando por su nuevo proyecto.

Una palabra por 30 díasWhere stories live. Discover now