Capítulo 13: Un secreto por otro.

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Dos semanas era el tiempo que había transcurrido en su casa. Frente a la ventana de su cuarto y con los primeros rayos de luz, Ace se quitaba el vendaje improvisado que tan mal se había puesto la última vez para comprobar la herida de su mano. Estaba muy cerrada y los puntos le tiraban, pero era lo normal tras haber pasado dos semanas, necesitaba quitarlos. Lo más lógico habría sido ir a ver a Law, pero no estuvo preparado para verle en ese tiempo.

Se levantó con rapidez de la silla al escuchar ruidos por el pasillo. Seguramente era su abuelo ya despierto. En el rancho siempre había demasiadas cosas que hacer y aunque estaba amaneciendo, era posible que hasta el desayuno estuviera ya en la mesa, lo que le indicaba, que debía darse prisa en bajar o su hermanito se comería todo. Era un glotón.

Salió corriendo de la habitación y bajó los peldaños de dos en dos, llegando a la cocina y arrebatándole de las manos, el bocadillo de beicon y longanizas que tenía su hermano, dando el primer bocado ante la queja del menor por tener que prepararse otro.

- Estás muy contento hoy para haber estado ayer marcando a las reses – sonrió su abuelo – en estos próximos días deberíais intentar domar a la mitad de los nuevos caballos.

- Lo sé, por eso mismo necesito que me quiten los puntos con urgencia. Creo que ya puedo moverla perfectamente si no fuera por cómo me tiran.

- He escuchado que los Rangers están en busca de buenos ejemplares para los nuevos cadetes. Es posible que les interese algunos de nuestros caballos. Ya tienen casi los siete años, una edad perfecta para empezar a venderlos, siempre y cuando los podáis domar.

- Los domaremos antes de la feria, te lo prometo – comentó Ace con una sonrisa mientras seguía comiendo el bocadillo preparado por su hermano – gracias por el desayuno, me marcho ahora. Tengo un largo camino aún hasta el médico.

- Sigues sin querer decirme quién es ese médico ¿No?

- Un antiguo compañero, sólo vive en el pueblo vecino – sonrió Ace para fingir aquella mentira – estará todo bien. Volveré a tiempo para domar algunos caballos. Te lo prometo.

Salió de la casa y caminó al establo para ensillar su caballo. Empezó a cepillarlo con lentitud, pero su mente no estaba en cepillar al animal, sino en cómo hablaría con Law después de lo ocurrido entre ellos.

- ¿Qué ocurre con ese médico? – escuchó la voz de su hermanito.

- ¿Qué tiene que ocurrir con él?

- Llevas dos semanas sin ir con tu grupo y evitando a ese... médico – sonrió Luffy.

- No le evito.

- ¿Ah no? Esos puntos deberían habértelos quitado hace al menos una semana. No has ido a verle por algo y no me pongas la excusa que has tenido mucho trabajo, porque en el rancho siempre hay cosas que hacer y siempre has encontrado tiempo para escaquearte.

- Voy a ir ahora ¿No? – sonrió Ace, revolviendo el cabello de su hermano para animarle.

- Ya... para no tener que ir a la estación ferroviaria a conocer a la hija del gobernador que llega hoy.

- ¿Llega hoy? – se hizo el ignorante, aunque su hermanito sonrió sin ser engañado.

- No te hagas el idiota, lo sabías muy bien.

- No me apetece mucho tener que conocer a nadie y menos...

- Cuando quieren obligarte a que tengas citas con ella ¿No?

Ace of Hearts (One piece, Law-Ace)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora