Capitulo 20

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Al día siguiente Alexia se encontraba sacando libretas de su casillero, que a los pocos metros se encontraba el de cierto azabache. Ella le sonrió y Sirac decidió acercarse a ella para ayudarle con sus libros cuando cierta chica de cabellos plateados a la que le había gritado que no lo volviese a buscar se interpuso entre ellos, acción que Alexia no pasó por alto y poco a poco iba retrocediendo, tropezando con sus propios pies y cayendo de espaldas mientras que los libros que traía consigo, cayeron regándose por todo el piso.

Cuando Sirac se disponía para ayudarla Marina lo detuvo y comenzó a envolverlo en un abrazo meloso para nuevamente exhibir su romance en los pasillos. En cuanto Alexia vió esto intentó levantarse mirando la burla de los mirones que conocían los chismes entre ella, Marina y Sirac.

Unas manos la ayudaron recogiendo rápidamente sus libros ya que la vergüenza se acumulaba en sus mejillas, comenzó a buscar su libreta de conversaciones y observó esa mano que la extendía hacia ella

-¿buscabas esto?-  la chica levantó un poco la vista para ver de quien se trataba. 

-hola, mi nombre es Dante- dijo aquel chico que la ayudó a levantarse , Alexia tomó la libreta y escribió un "gracias".

Dante era un chico de cabello castaño, casi tan alto como Sirac, ojos cafés, y labios ligeramente carnosos. Cuando Dante observó la respuesta en la libreta se maldijo a si mismo 

-disculpa no sabía que tu eras..muda-

Alexia trató de darle una sonrisa algo forzada mientras Sirac observaba esa escena; quería ir con Alexia pero Marina estaba ahí seduciéndolo de tal forma que le era difícil resistir aquello.

-Esa muda no gime tan alto como yo ¿lo sabes verdad? que dices ¿vamos a divertirnos como antes?-  

Sirac ya sabia de que diversión le hablaba ella, no era preciso que se le especificara así que nuevamente tomó a Marina de la muñeca dirigiéndose al baño de chicos.

Alexia observó aquello; y algo dentro de ella se quebró. "nada de mariposas Alexia, recuérdalo" .  Solo estaría para el cuando el la necesitara y en ese momento, no la necesitaba.

Por un momento había olvidado que Dante estaba frente a ella y decía algo que no había escuchado, este se percató de aquello y nuevamente repitió.

-te decía que si te acompañaba a tu salón ¿puedo ayudarte con tus libros?- la rubia asintió y le entregó los libros al chico. 

Todo el camino ella ignoró por completo al chico que hablaba y hablaba. Cuando por fin llegaron al salón de Alexia este se despidió de ella depositando un suave beso en su mejilla y un ligero sonrojo se hizo presente en su rostro. Entrando al lugar encontró a Kaori y Renata sentadas sobre la mesa de su pupitre comiendo unas papas crujientes. Kaori viéndola se acercó a ella.

-ohaiyo !! adivina que Alexia , iremos al parque con las chicas y unos fastidiosos chicos que ellas quieren llevar a la fuerza ¡ ven con nosotros! tal vez podrías ir con Sirac. La mencionada solo se encogió de hombros sin mostrar algún interés en ello.

-podríamos ir nosotras solamente- la rubia asintió , sus pensamientos nuevamente se iban a la escena con Sirac , no sabia porque le dolía verlo con Marina ¿acaso eran celos?. no sabia porque le dolía verlo con Marina si no era su novio.

Al finalizar las clases no queriéndose encontrar con nadie llegó a su casillero puso la combinación y metió sus libros con tanta prisa que terminó aventandolos, no quería voltear a ver el casillero del azabache pero lo hizo y se encontró con otra escena de melosas caricias entre el chico y Marina , esta ultima le sonrió con malicia. Sirac no se dió cuenta de la presencia de la rubia ya que estaba concentrado en tocar a la peliplateada.

-vamos a mi casa ¿te parece?- 

el chico no esperó una respuesta cuando ya estaban caminando de prisa hacia la salida con ella de la mano. Alexia nuevamente observó aquello y antes de que Sirac arrancara el motor en marcha pudo ver a la rubia mirándolo con cierta decepción. Alexia se marchó en sentido contrario y el chico arranco a toda velocidad sintiéndose confundido.


¿porque había sentido esa tristeza al verla con esa expresión? 






Te he encontrado,  mi pequeño girasolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora