Ash recordó el último día de acción de gracias que pasó en Cape Code. Jennifer estaba rellenado un pavo con ciruelas y salsa de naranja, empujaba hasta que ya no cabía nada más dentro, entonces lo sellaba con una red para que la comida no se escapara. Por muchos años Ash se sintió cómo ese pavo. En el como sólo le metían cosas a la fuerza. Miedo, ira; odio, tanto odio. Estaba lleno y una red invisible lo cubría todo para asegurar que nada se esfumara. Presentía que llegaría el día que ya no podría entrar nada más. Todo explotaría y quedaría esparcido cómo el universo después del Big Bang, incapaz de unir todas sus partículas juntas otra vez. Entonces sería cómo el muñeco viviente que todos los cerdos de clientes que tenía pensaban que era, o la viva imagen del diablo sin alma que creían que era en las calles.
¿Cómo había llegado a tirar su humanidad por el barranco? Acaso fue después de todas las veces que esos viejos repugnantes lo arrojaban sobre la cama y hacían lo que les placía, enterrando su rostro con violencia en las almohadas para callar sus sollozos, cómo si quisieran olvidar lo que era. Lo colocaban sobre sus rodillas cómo si fuera un animal, y no pasó mucho hasta que Ash se sintió realmente cómo uno. Fue talvez después de las incontables veces que jaló el gatillo sin un sólo parpadeo. Sin ningún ápice de piedad aun cuando los ojos de sus víctimas estaban pintados de terror. O luego de encontrar a Griffin convertido en un vegetal, perdiendo la única fuente de apoyo externa a la violencia que decoraba su vida. Después que una bala despedida por su propia mano atravesara el corazón de su leal mejor amigo.
Y luego apareció una fuente de luz. La única persona que había reconocido su corazón y alma desde el primer momento. la cual nunca lo tiñó de prejuicios aun sabiendo muy bien quien era y que hizo. La única persona en reconocerlo cómo un humano. En hacerlo consiente una vez más de su propia piel. De su dolor, de su temor, su esperanza y amor.
Talvez no era una mala idea volver a apoyar la cabeza en alguien, dejar que lo cuidara, que lo contuviera.
Era egoísta.
No quería sentir más culpa.
Quería sacarse las espinas de encima.
Quería sentir todo lo que necesitara sentir.
☽
Estaba ordenando los platos en donde Eiji y él habían comido mientras esperaba que el chico se duchara y cambiara la ropa mojada.
Escuchó la ducha encenderse y una sensación que creía inexistente pasó cómo un rayo calentando toda su sangre. Como si se tratara de un volcán dormido por siglos despertando súbitamente.
A sólo unos metros estaba Eiji. Desnudo. No es que no hubiera pensado en lo que había debajo de la ropa del japonés antes, pero siempre desechaba esas imágenes inmediatamente. No estaba seguro que pensar cuando aparecían. El tiempo nunca era suficiente para profundizar en eso y la verdad es que no estaba seguro de querer hacerlo. Sólo deseó a una chica antes y nunca supo que hacer con eso. Pensaba que el deseo era codicioso y sucio, una situación para sacar provecho del otro. Por eso siempre que aparecía con Eiji lo apartaba con una rapidez inconcebible. Y entonces recordó la manera en la que se habían besado tantos meses antes. Tan jodidamente maravilloso. Tan real. No había de parte de Eiji ninguna ambición sobre Ash. Sólo las palabras que ambos quisieron decirse por tanto tiempo, atrapadas en el aire por no saber si era lo que el otro quería escuchar. Ahí estaban. Se sintió lo correcto, lo válido. Como si cada toque de Eiji borrará las inmundas marcas que muchos otros habían dejado sobre su cuerpo. Como si liberara al fin su capacidad de desear, no sólo sexualmente, sino de ansiar la vida y la esperanza. Dejar de ser el leopardo que no pudo encontrar el camino de vuelta y crear el suyo.
Si pudiera volver a tenerlo ¿Lo haría?
Sin pensarlo dos putos segundos.
No quería lo efímero.
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Vital
FanfictionAsh Lynx ha vuelto a escapar de las garras de la muerte. ¿Sería esta una nueva oportunidad o simplemente la inevitable persecución de siempre? Final alternativo de Banana Fish. Historia terminada. ATENCIÓN: -Sólo la historia me pertenece. Los pers...