Be my Valentine! ♡[KawoShin]♡

Una vez más contigo

Por: CharlotMAD
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Iba caminando contento y cantarín por la calle. Kaworu por lo general era más bien un chico reservado públicamente, pero en ese día tan especial no podía evitar expresar su alegría a medio mundo. No era para menos, pues se dirigía al departamento de su lindo y sexy novio para festejar juntos el tan esperado día de San Valentín.

Hace varios meses que Shinji y Kaworu eran novios, pero ese iba a ser el primer día de los enamorados que pasaban juntos. Además, hace poco Shinji por fin se había ido a vivir sólo y estaba ansioso por recibir esta vez él a Kaworu en su casa para variar.

El albino se vistió para la ocasión con un bonito y formal traje negro que había comprado hace unas semanas y de paso, compró una docena de las más grandes rosas rojas, y las llevó adornadas con una hermosa cinta plateada.

Pensó en llevar chocolates también, pero recordó que a su novio no le agradaban demasiado.

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Una vez llegó a la puerta del departamento de Shinji, se tomó unos segundos para volver a arreglarse el traje, cosa que se viera más ceñido a su cuerpo, y también se volvió a peinar un poco para lucir totalmente impecable.

Tocó el timbre y en seguida escuchó los pasos ansiosos de Shinji. Este abrió la puerta y quedó casi en shock al recibir a su pareja.

—Hola, Shinji... —Kaworu se percató de la bonita ropa casual del chico. Esa clásica camiseta de mangas cortas color rojo salmón, junto con esos jeans azules que estilizaban sus delgadas piernas.

Shinji se tomó un momento también para mirar descaradamente a Kaworu de arriba a abajo, incluso antes de hacerlo pasar. Su novio tenía un muy buen cuerpo, y ese traje lo hacía ver más elegante y portentoso, acrecentando su belleza, sensualidad y glamur.

Ah, y también había unas rosas rojas bastante notorias con él, de las que a penas se había percatado.

—Te traje este ramo de rosas. Sé que se verán muy bonitas en tu nuevo hogar —dijo con su clásica sonrisa amplia.

Shinji pareció desconectarse de su trance y se palmeó la cara como regañándose a sí mismo.

—Están preciosas, Kaworu. Muchas gracias, de verdad —las tomó y percibió su fresco aroma—. Serán lo más hermoso que ha estado en este departamento desde que me mudé...

—Claro que no, Shinji. Porque nada supera tu linda carita... o tu lindo--

—¡Bien, entra ya! Antes de que llegue alguien más... —Shinji agarró del cuello a Kaworu y lo tironeó hacia el interior, a lo que este respondió divertido.

Shinji sin titubear demasiado ya le estaba quitando la chaqueta a Kaworu, dejándolo sólo con la camisa blanca.

Kaworu encontró este gesto bastante curioso e interesante, pero de inmediato se dio cuenta de que lo hacía por cortesía, para que estuviera más cómodo.

Después de colgar la chaqueta de su novio en la pared, Shinji tomó con sumo cuidado las bellas rosas y las puso rápidamente en agua. No disponía de un florero, así que las depósito dentro de un jarrón con agua fría para luego acomodarlas en la mesa de la sala de estar.

Las contempló por un momento y entre todo eso, Kaworu se le acercó por detrás para estrecharlo en sus brazos y darle uno que otro beso en el cuello.

—¿Ves? Están de maravilla...

—Gracias, Kaworu... tú siempre recuerdas cuanto me gustan las rosas... ¡Pero nunca me habías traído tantas!