Be my Valentine! ♡[KawoShin]♡

Into the night

Por: Tabris-XX

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Se conocieron por casualidad a través de una aplicación móvil destinada mayormente a compartir fotografías, pero ninguno tenía en su perfil un solo retrato de ellos mismos. Uno de ellos, un chico cuyo nick era "Mark-06", siempre publicaba instantáneas de su elegante piano de cola con partituras en él, que según decía se encontraba practicando en ese momento. Decía ser un apasionado por la música clásica, amante de los gatos aunque alérgico a ellos, aficionado a la astronomía y bebedor compulsivo de café. Solía subir vídeos donde solo se apreciaban sus blancas y delicadas manos interpretando fragmentos de composiciones muy conocidas.

El otro, escudado bajo el nick de "Eva01" era más ambiguo, sus publicaciones giraban más bien en torno a las comidas que preparaba y a las bellas flores que tenía en su pequeño jardín. Se describía como chef amateur y músico frustrado. En ocasiones le daba por quitar su cello y ensayar un poco para no perder la práctica. El día que se animó a subir una fotografía de su instrumento de cuerdas, diciendo que Bach le seguía resultando complicado y poniendo etiquetas específicas relacionadas a la música. Unas horas después, recibió la notificación de que de tenía un nuevo seguidor, cosa que le sorprendió porque no era nada notable y ni siquiera llegaba a la veintena de seguidores.

Al revisar el perfil ajeno, se dio cuenta de que se trataba de un chico pero no logró dar con ninguna foto que le enseñara el rostro ajeno. De todos modos y en agradecimiento, también lo siguió. No pasó mucho para que le llegara un mensaje privado, era uno de su nuevo contacto. Lo primero que el joven pensó, fue que se trataba de un saludo pero en realidad no era así sino más bien una pregunta que encontró un tanto extraña.

"¿En verdad Bach te ha complicado tanto la existencia?"

Shinji Ikari quedó confundido ante eso y respondió enseguida.

"Sí, es mi compositor favorito pero nunca me llevé bien con sus obras. Lo más probable es que yo no tenga ningún talento."

La contestación no se hizo esperar.

"Solo es cuestión de práctica y paciencia. Me encantaría escucharte tocando alguna vez. Estoy seguro que eres muy buena, solo creo que deberías tener más confianza en ti misma."

Ikari sonrió al leer esa respuesta. Ese chico lo estaba confundiendo y dio por sentado de que se trataba de una mujer, de seguro eso era porque le confundió su nombre de usuario.

"En realidad soy hombre."

"¡Oh, lo siento! Creí que te llamabas Eva."

"No, Eva es el nombre que le puse a mi violonchelo. Me llamo Shinji."

"Es un gusto conocerte, Shinji. Yo soy Kaworu."

"El gusto es mío. Pensé que te llamabas Mark."

"No jajajaja mira qué coincidencia, yo llamé Mark a mi piano. Eres la primera persona a la que se lo digo, pensé que era un detalle muy tonto pero me alegra saber que no soy el único que bautiza a los objetos de su propiedad."

Así fue que inició una linda amistad online entre aquel joven llamado Kaworu Nagisa -quien vivía en Alemania- y Shinji Ikari -quien residía en Japón- la cual se prolongó en esas condiciones por alrededor de un año. Los chicos estaban en contacto todos los días y prácticamente a todas horas, a pesar de la diferencia de horarios.

Luego vinieron los intercambios de fotografías, con lo que por fin conocieron sus rostros y hubo una suerte de flechazo y atracción instantáneos. Nagisa era un muchacho de 23 años, sumamente atractivo, dueño de una peculiar cabellera gris y unos ojos carmín que realzaban su belleza natural. Shinji era un año menor que él, tenía el cabello castaño y los ojos azules, no pudo evitar sentirse poco agraciado frente a alguien tan hermoso como el otro chico.