Be my Valentine! ♡[KawoShin]♡

Suspiros entrelazados

Por: ikari_moonwalker
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Durante la infancia, el hecho de amar suele ser muy aburrido. Incluso frustrante y sin sentido. Al amar a una persona se sale lastimado, y eso para un niño inexperto no es nada bueno.

Shinji Ikari vivió eso cuando tenía 8 años. Ver a su hermana mayor desesperar y enojarse por un amor no correspondido lo inquietaba. Jamás había visto a Asuka de esa manera tan frágil y ahogándose en su propio llanto. Lo sorprendía demasiado, incluso no parecía su hermana.

-Jamás me enamoraré de ninguna chica -dijo para sí mismo luego de ver a su hermana entrar a la habitación azotando la puerta a su paso.

Lo cierto era que a su edad no tenía mucho que decidir, pues seguramente sus ideas cambiarían al ir creciendo.

Y en efecto, Shinji se enamoraría de alguien, pero aún no era el momento indicado.

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Los años pasaron, y cuando Shinji tenía 13 años su hermana anunció su compromiso. No creía lo mucho que había cambiado la vida de Asuka, pues después de haber llorado por tantos amores que la dejaban herida, finalmente se casaría y con alguien que la complementaba. Era una chica más relajada, alegre y que no era egocéntrica. Mari Makinami, quien derrochaba bastante amor por Asuka.

Shinji no entendía porqué sus padres se habían sorprendido pues desde que eran amigas él noto que entre ellas había algo más. Y justo en ese preciso momento supo que de una u otra manera es posible encontrar la felicidad al final.

Y en un instante el universo conspira para unir cada alma que nació para amarse, colocando los eventos de la mejor manera para que todo se relacione de la manera correcta.

El viento corría helando la sangre de cualquiera. La mañana era perfecta para quedarse en la cama bajo la cómoda calidez que esta brindaba. Aunque para la mala suerte de Shinji este deseo no era posible pues tenía que ir a la escuela. Se preparó para salir y una vez listo pasó a despedirse de su madre, pero ella seguía dormida.

Salió de su hogar caminando por las calles entre el tumulto de personas.

Al llegar a la escuela pudo observar distintos anuncios pegados en las paredes. La mayoría publicitando un concurso de música, al cual todos los alumnos estaban invitados a participar.
Al ver esto, Shinji se emocionó. No por él mismo sino por su amigo Kaworu Nagisa, el cual muy probablemente querría participar.

Kaworu tocaba el piano como nadie más, transmitiendo un sentimiento único con cada melodía. Ambos eran amigos, y desde su llegada se habían entendido muy bien.

Desde que Kaworu llegó llamó la atención de todos inmediatamente. Su belleza y sus rasgos sorprendían: su cabello platinado y sus hermosos ojos rojos atraían a todas las chicas de la escuela, dejando a varios de sus compañeros con bastante envidia al ver la suerte que él poseía.

Sin embargo, algo que realmente los sorprendía era que a pesar de las diversas declaraciones de amor que había recibido jamás aceptó ninguna. Para las chicas parecía una tragedia y para los chicos algo completamente ridículo. Y para Shinji era un motivo más para sentirse feliz.

Shinji sabía que su promesa se había roto hace tiempo. Eso de "no me enamoraré de nadie" cayó en el olvido cuando conoció a tan guapo albino, quien con sus múltiples encantos lo dejó fascinado. Pero a pesar de todas las atenciones del chico, Shinji no se consideraba lo suficiente para Kaworu. Además creía que este lo veía sólo como a su mejor amigo, pero a pesar de todo se sentía satisfecho teniendo un lugar relativamente importante en la vida de Kaworu.