Te Extraño.

Dividido.

Género: [♂][–][♀]

Relación: Kris, Frisk & Chara.
Kris & Susie.

~♤◇♡♧~

De tu vida, no podrías decir mucho.

Sí, quizá esta ya ha sido masacrada en todos los sentidos (y tu contribuyendo a las causas nunca fue de ayuda) pero a este punto ¿que mas podrías perder? Primero de un ente desconocido que controlaba tus acciones a que un par de infantes fueran quienes manejaran tu cuerpo a su antojo. Y tú, porque ya te habías rendido, nunca hiciste nada al respecto.

Estabas cansado, agotado, exhausto, como quieras llamarlo. De no ser por tu familia tu ya habrías acabado todo esto años atrás. Ya no sentías emoción ante un nuevo día, ya no deseabas hablar con quienes te rodeaban, la comida que tu madre preparaba con amor para ti dejo de ser apetitosa, no veías el sentido en salir de tu cama e empezar la rutina, las clases que en algún momento te llegaron a interesar ahora solo eran algo a lo que tenías que asistir.

Te rendiste en actuar, te rendiste en vivir. Te negaste a lastimarte, pues sabias que quien realmente saldría herido de todo esto sería tu madre. Realmente podrías haberlo acabado todo en lugar de alargarlo. Pero te rehúsas. Lo único que deseas es irte y no causar daño a aquellos que te aman. Nada mas.

¿Pero como? Eso es lo que siempre te preguntas.

Ahí es cuando ellos entran en escena.

Un día aparecieron dentro de tus sueños. En un lugar obscuro, vacío, se presentaron ante ti. Ellos buscaban un lugar a donde ir, un lugar a donde pertenecer. Buscaban un nuevo hogar. ¿Y que mejor que tu vida? Después de todo, es mejor donar algo que no usas a desperdiciarlo.

Quizá hiciste la opción correcta, quizá no, fuera lo que fuera ellos prometieron ayudarte en retorno por tu sacrificio.

Nunca les perdiste nada a cambio honestamente. Diste lo que creías ya no era necesario para ti, simplemente dejaste de preocuparte, y por esa razón nunca cuestionaste sus acciones. Nunca cuestionaste el porque los primeros días que abandonaste todo ellos a veces decidían borrar a todos en la cuidad para que al siguiente mágicamente volviesen a la normalidad y ellos convivieran con los demás como si nada hubiera pasado.

Para nada. Tu ya no tenías ningún asunto con el mundo exterior. No era tu problema. No es de tu incumbencia lo que ellos hagan. No es de tu incumbencia lo que ocurra.

Ellos tienen historia; un pasado del cual escaparon, solo para que acabasen en esta pequeña ciudad rediciendo dentro de tu cuerpo.

Ellos siempre discutían; desde pequeñeces hasta situaciones graves. Esconder o revelar, mentiras o verdades, pasados o futuros, esperanza o miseria. Genocidio o pacifismo. Todo tipo de temas solías escucharles debatir.

Ellos poseen nombres, pero tu sueles llamarles por los colores con los que sueles percibirles; Frisk, tu le llamas Azul. Chara, tu le llamas Rojo. Kris, ambos te nombraron Gris.

Despues de un largo tiempo, tal parece que la gente (finalmente) ha empezado a notar tu comportamiento variado. Pero no eres tu, tu te habías rendido hace años.

Tu familia se preocupa por ti, por eso se han dedicado a investigar. Lo hacen por tu bien. Después de semanas de de revisión en páginas web, en libros sacados de la escuela al igual que  bibliotecas sin mencionar las constantes visitas con diferentes médicos y expertos, todo concluyó con que sufrías de Transtorno de Personalidad Múltiple.