IV

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Las gotas saladas aun goteaban de la cabellera negra, su cabello se encontraba completamente mojado y al igual que su ropa.

- Ya basta Sinbad - hablo la ex-soldado.

- Necesito secarte, te resfriaras - declaro el marino con el ceño ligeramente fruncido. No estaba enojado, simplemente no quería que ella estuviera enferma.

- No estoy tan mojadas, el cabello se secara con el calor del sol al igual que mi ropa - informo la ex-soldado mientras ponía su cabello hacía un lado y lo empezaba a exprimir así logrado chorreara el agua.

Hace unos minutos, ambos se encontraban en el barco pescando, y como una tormenta, un chorro de agua le cayo encima a la ex-soldado.

El marino simplemente suspiro. Aunque ella ya haya estado 2 años con ellos, a veces se comportaba como la primera vez que la conocieron, aunque con el tiempo empezaba a ser un poco mas expresiva. Se mostraba así únicamente con las personas de Villa Tison, y en especial con el marino.

Aunque sus heridas habían sanada en su totalidad, ella se quedo con ellos, a lo que Ersa y Sinbad no tuvieron queja, ya se habían acostumbrado a tenerla cerca. Podría decirse, que ahora ella era parte de su pequeña familia...

- Ven -el marino atrajo a la ex-soldado y se puso detrás suyo y le empezó a hacer una trenza, dejando aquel mechón que aun le cubría casi por completo el ojo de la ex soldado.

- ¿me pasas el lazo? - pidió el marino, cosa que la ex-soldado le paso el "listón" de color rojo, que en realidad era como un hilo rojo grueso, que le había dado el marino aquella vez. - Ya estas lista! - declaro orgulloso

Ersa, que se encontraba observando esa escena con ternura. Ella tenía la esperanza de que ellos, en algún futuro ellos estuvieran juntos, que se enamoren y se casen.

- Gracias Sinbad - agradeció la de cabellos negros con una ligera sonrisa en su rostro.

- De nada!, Ven vamos a ver si conseguimos trabajo, la pesca ah sido restringida así que mejor vamos! 

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El sol acariciaba las pieles de todos los que se encontraban expuestos a el. Algunas personas que fueron reclutadas no se presentaron, y ahora solamente buscaban como sobrevivir, ¿de que manera?, robando.

- Sinbad - la ex-soldado de cabellos negros que se encontraba sentada en el muro admirando aquella escena miro al marino, que se encontraba mirando como unas personas estaban asaltando a unos mercaderes.

Su objetivo era claro, llevarse la mercadería, y, sobrevivir. 

El marino le sonrió a la ex-soldado con dulzura, diciendo que el se encargaría.

- ¡Deténganse! - grito el marino, así, llamando la atención de las personas presentes.

- eh?, vaya, solo es un mocoso, pero tiene buena compañía - miro a la ex-soldado con ojos lujuriosos. Aunque ella solamente tenga una edad aproximadamente a la misma que el marino, era muy hermosa, sus cabellos negros y sus hermosos orbes que eran del mismo color que el inmenso mar, ambos combinaban perfectamente con su rostro, que reflejaba inocencia y amabilidad. A simpleza, ella no aparenta ser una amenaza.

- ¡Vete a casa niño! - grito uno de los delincuentes.

- ...¡Los humanos son como las olas!... - una sonrisa se le formo en la cara del marino - ¡No hay ola que yo no pueda dominar!

La ex-soldado solamente se quedo mirando como el marino se encargaba el solo de los delincuentes, lo hacía parecer tan sencillo. La forma en la se movía, era muy fuerte, y muy ágil. Sería un buen oponente.

Ella al percatarse que el marino había logrado con éxito derrotar a aquellos delincuentes, dio un salto, aterrizando de pié encima de uno de los delincuentes se estaba apunto de atacar a la pequeña niña que se encontraba ahí. La pequeña niña se le quedo mirando con asombro y admiración.

- ¿te encuentras bien? - cuestiono el marino a la ex-soldado, ganando un "si" de parte de ella.

- ¡Muchas gracias! - agradeció una de las mujeres.

La pequeña niña se acerco a la ex-soldado y le abrazo la pierna, ganando un pequeño sonrojo de parte de la de cabellos negros.

- Son tan asombrosos!! - chillo la pequeña con emoción.

- Solamente tuvimos que leer sus olas pequeña - el marino se puso a su altura y le sonrió.

- Eso solamente lo haces tu... - pensó la ex-soldado mirando al marino con cierta dulzura.

- ¿Como podemos pegarle? - pregunto una de las mujeres muy agradecida.

El marino simplemente dijo que no era necesario, pero, llegaron al tema de que el y la ex-soldado podían servirles como guardias. Pero ellas simplemente dijieron que viajarían en mar, nadies podría hacerles daño ahí.

- Que lastima 

- Ultimamente la pesca esta limitada, y es una verdadera lastima que no podamos ayudarlas con nada, realmente me hubiera agradado estar con gente como ustedes - les sonrió (falsa obviamente) la ex-soldado a las mujeres que se encontraban ahí. Así ganando un sonrojo de parte de ellas. 

Ella, se podría decir que tenía cierta habilidad de provocar ciertos sentimientos a las personas por ser muy bella, al igual que el marino. Solo que ella tenía esa "habilidad" con ambos generos.

- N-no deben irse con las manos vacías!, tenemos fruta fresca, pueden llevarse algunas! - ofreció una de las mujeres mientras se aproximaba al carruaje.

- ____ no deberías hacer eso - le regaño el marino a la de cabellos largos mientras le daba un leve golpecito en la cabeza con su puño.

- Solo fue un experimento Sinbad - declaro esta vez con su tono monótono la ex-soldado mientras se acercaba al carruaje, al igual que el marino.

Realmente, ella solo quería ver si todas las personas eran iguales, parece, que solo se fijaban en la apariencia fisica. Se preguntaba si eso sería de utilidad en el futuro, o una debilidad.

- En este baríl podras encontrar lo mejor de nuestra cosecha - la mujer abrió la tapa del barril, encontrandosé con una persona dentro...

-... - Todos se quedaron sorprendidos al ver aquella persona en el barril, al final y al cabo ver a una persona en tu barril no es normal.

- ....¿¡Por que abren sin permiso?! - se quejo de una forma infantil para cojer la tapa del barril y cerrarlo, con el adentro...

- ¡AHHHHHH! - gritaron las mujeres...

El marino y la ex-soldado simplemente se quedaron mirando el barril. Sin saber que aquella persona sería el causante de aquella aventura que pronto comenzarían ambos, pero al mismo tiempo, aquella aventura los separo.

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Hola! 

Quiero decir que, yo leí el manga de SNB, y para no sacar spoiler, o algo que no entiendan, les recomiendo leer el manga.

Así entenderán mas el trama de esta historia llena de aventuras.

Aparte de eso, si no es molestia me gustaría que vieran una de mis historias mas recientes, "Una Ultima Vez" trata sobre Yunan y tu. tal vez les guste!

bueno, bye!


Cuando Éramos Niños.... | Sinbad Y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora