-Y-Yoongi- lo llame con claro terror recorriendo todo mi cuerpo
-¿qué pasa?...
-acércate
-de acuerdo, me estas asustando- se acerco hasta quedar a mi derecha y poder ver lo que yo miraba, estábamos fuera de la casa, dentro de la reja que rodeaba la cabaña, en el jardín de esta había unas sillas y una mesa, nos encontrábamos mirando en dirección a corea del norte, vimos con claridad como personas se juntaban y se acercaban. Claramente estaban infectadas, los sonidos que producían sus gargantas no eran naturales y la forma en la que caminaban, además se veían podridos, como si ya llevaran buen tiempo muertos, eran alrededor de unos cincuenta y se acercaban con mucha lentitud
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-b-bien, no hagas movimientos bruscos, camina lento y en silencio- susurro Yoongi
-¿qué?
-camina en silencio- se dio la vuelta, sujeto mi brazo y me halo hasta entrar a la cabaña con gran sigilo y silencio, para luego cerrar la puerta y colocar una silla como si tratará de atrancar esta, luego se dirigió a la ventana que daba a Seúl, corrió la cortina y se sentó colocando su espalda en la pared, cogió su pistola, la cargo y se preparó para lo que sea, yo con temor me acerque a él me senté a su lado y cogí con gran torpeza el fierro que me acompañaba desde la mañana, también cogí un cuchillo y me prepare mentalmente, otra vez.
Estábamos en silencio esperando a enfrentarnos a lo que sea que pase ahora, ya empezaba a sudar al escuchar como esos gruñidos estaban cada vez más cerca, las pisadas, las quejas que salían de esos labios secos, lo malo es que empece a temblar y las ganas de ir al baño me traicionaron, mis manos estaban perdiendo calor y por el rostro preocupado de Yoongi pude darme cuenta que estaba pálido, a ver, no ahora, no puedo dejar que esto siga así, tengo que controlarme, no puedo permitirme que esto me pase ahora, necesito defenderme, Yoongi no lo hará por mi, puedo sobrevivir solo, los infectados ya estaban fuera de la cabaña y sus sombras se reflejaban por dentro de la casa haciéndolas totalmente visibles para nosotros
-bien, todo estará bien Jimin relájate
-estoy tranquilo, solo no hables
Vi por el rabillo del ojo como Yoongi bufaba, tengo que dejar de ser tan grosero o sera capaz de entregarme a esas cosas en un santiamén, esas cosas estaban más cerca pues se escucho como uno ya había entrado a la reja de la casa y se había tropezado con la pequeña mesa que quedaba justo en medio del jardín causando mucho ruido y las sombras que ya se reflejaban dentro se movieron y los pocos infectados que estaban nuestras espaldas siguieron aquel ruido, uno de esos idiotas vino de frente a la ventana y la golpeo, mi sangre se heló y me acerque más a Yoongi, todo estará bien. El tarado dejo de intentar golpear la pared y paso de frente siguiendo a los otros infectados, ya todos estaban justo en la puerta de la casa, Yoongi apunto con su pistola en dirección a esta, esperando que uno de estos entrará
-no seas idiota- le susurre- estamos atrapados y el ruido que ocasionaras atraerá a toda la puta horda, moriremos- él bajo el arma y cogió un cuchillo
Ya estamos listos para lo que sea, ya no importa, los matare, no voy a tener piedad con esas cosas, los minutos pasaban y los imbéciles no se movían y eso no hacia más que ponerme los pelos de punta...
Los minutos pasaban y uno de esos se encargo de golpear la puerta llamando la atención de los otros infectados, ya no habían muchos, al parecer que de los 50 aproximadamente solo quedaban unos 10 o 20, pero ahí seguían y uno llamaba su atención, ya parados y preparados para atacar se escucho como un par de estúpidos pasaban en una moto gritando y riéndose, pude ver como las sombras se alejaban en busca del ruido, al parecer los muchachos venían de corea del norte pues se dirigieron a Seul luego escuchamos gritos y gruñidos, se alejaron y nos dieron a entender que técnicamente ganamos, estábamos a salvo
-que gran puto susto me dieron las pendejadas esas- dijo Yoongi al dejarse caer al suelo
-hay que agradecerles a los tarados que pasaron en la moto
-si... no creo que haya forma de hacerlo- suspire- ¿qué pasa, bonito?
-ya te dije como me llamo
-¿qué pasa, Jimin?
-quiero llamar a mis amigos- el silencio reino en aquella pequeña sala
-Jimin... mira, no quiero ser aguafiestas ni nada por el estilo, pero- decidí interrumpirlo
-se a quien llamar
-¿a quién?
-en una situación así, creo que se quien puede sobrevivir, Jungkook, él puede y es más que seguro que si no esta con Tae está con Yugyeom
-ya ¿y?
-llamare a Yugyeom
-bien, hazlo, no te lo voy a impedir
-bien- me acerque al teléfono y marque al número de uno de mis compañeros de aula que no me trato como un anciano y me agrado igual que Jungkook, los pitido sonaban y el nombrado no contestaba, decepcionado corte la llamada y me senté a lado del teléfono
-¿no contesto?- pregunto Yoongi a lo cual me entró gran coraje pues mi expresión corporal y facial lo decían todo
-¿no puedes preguntar algo más obvio?- me calle al escuchar el teléfono sonar, disparado me levante de mi lugar y conteste
- ¿Yugyeom?
*¿Jimin hyung?
-que emoción, Yugyeom, ¿estas bien? ¿donde estas?
*HA Jimin hyung, el emocionado soy yo, Jungkook ha estado muy preocupado por usted
-¿estas con Jungkook?
*si ahora se lo paso
-de acuerdo
*Jimin-ssi
-kookie, ¿están bien?
*si, ¿usted esta bien?
-si me alegro que estén bien ambos
iba a seguir hablando si no hubiera escuchado una voz familiar que en verdad me agrado escucharla y que Jungkook dejará de hablar tras la linea por darle importancia a esa voz
*¡¿JIMIN?!
sin duda jamas me cansaría de escuchar esa amigable voz gruesa, solté una carcajada por el tono preocupado de mi mejor amigo
