Epílogo

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Un año después.

Jimin se sentía nervioso. Creyó que aquel momento jamás llegaría sin embargo, estaba pasando.

-Kookie...- susurró Jimin.

-¿Qué sucede cariño?- respondió dulcemente su novio.

-Tengo miedo...

-Jiminie... Estoy aquí precioso, estoy contigo y mientras estemos juntos nada malo pasará.

-P-pero ¿Y si no funciona?...

Jungkook se puso delante de Jimin, agarró sus mejillas y deposito un suave beso en su frente.

-Funcionará.- dijo tomando ambas manos del pelirubio.

Jimin escuchó como la puerta se abría y cerraba y luego unos pasos dirigiéndose hacia él hasta detenerse. Su cuerpo entero tembló.

-Bien.- habló la voz.- Está todo listo, terminemos esto de una vez.

Al escuchar aquello apretó fuertemente la mano de su novio a lo que el nombrado respondió un cálido "todo estará bien"
Sintió como unas manos ásperas tocaban su rostro para luego despegar lentamente la venda.

Jungkook había trabajado durante un año entero debido a sus gastos para poder pagarle una cirugía a su novio, cuando al fin consiguió el dinero suficiente y de sobra, mintió a Jimin diciéndole que irían a comer. Al llegar Jimin comenzó a sentirse incómodo ya que en definitiva no olía a comida sino un horrible olor a medicamentos.
Confundido preguntó donde se encontraba a lo que su novio no respondió.

Pasó así minutos hasta que llegó un señor y comenzó a hablar sobre un trasplante de córnea. Asustado preguntó nuevamente que sucedía y ahí fue cuando su novio le explicó todo.

Jimin quería llorar, se sintió feliz y nervioso. La sola idea de ver a su novio lo hacía feliz, pero también tenía miedo de que no funcionase.

Aquello había sido planeado desde hace tiempo y por suerte alguien decidió ser donante, aunque no supo quien.

Jungkook aún no quiso decirle que quien había decidido donar fue la madre adoptiva de Jimin, la cual  buscó durante mucho tiempo, sin embargo había sido muy tarde al encontrarla.

Él quería buscar el momento indicado, decirle que su madre a pesar de todo lo amó hasta la muerte con todo su corazón.

Luego de poco más de una hora y media, había llegado el momento.

Lentamente el doctor fue retirando la venda hasta sacarla por completo.
Jimin suspiró pesadamente, sus ojos aún se mantenían cerrados, tenía miedo de abrirlos.

-Bien, necesito que abras tus ojos lentamente.

Jimin tardó un poco pero finalmente lo hizo. La resplandeciente luz lo incómodo pero rápidamente se acostumbró. Lo primero que divisó fue a un señor alto y barbudo el cual al verlo sonrió. Jimin dirigió su mirada recorriendo todo el cuarto, habían muchos colores que él no conocía, formas, objetos, todo era totalmente nuevo.

Se sentía como un recién nacido.

-Jiminie...- al escuchar aquello, lentamente Jimin giró su cabeza hacia donde provenía aquella voz.

Y lo vio, pudo verlo.

Jungkook le sonreía con una inmensa ternura. Jimin levantó sus manos hasta tocar aquel rostro.

Simplemente hermoso.

Siempre trato de darse una idea de como sería su novio, pero ahora que lo veía, Jimin definitivamente pensaba que era una persona totalmente afortunada. Jungkook era muy bello, sus labios eran pequeños, sus ojos resplandecían y sus cabellos caía por sobre su frente.

-Jungkookie...- susurró Jimin comenzando a llorar. Era el mejor día, al fin podía ver al amor de su vida frente a él.

-Oh cariño... No llores precioso...- Jungkook abrazó a Jimin repartiendo besos por su cuello. El doctor había decidido dejarlos solos.

-Eres hermoso Jungkookie...- al escuchar aquello Jungkook acarició su rostro felizmente.

-Tú eres aún más hermoso Jiminie.- Jungkook lo agarró de la mano hasta llevarlo frente a un espejo.

Jimin no dijo nada al verse, simplemente se observó detenidamente.

-¿Realmente este soy yo?...- habló luego de unos minutos.

Jungkook agarró a Jimin de los hombros haciendo que se miraran.

-Así es Jimin, ese hermoso chico eres tú, mi ángel.

Jimin sonrió. Ambos se acercaron lentamente, Jungkook lo agarró de la cintura mientras que el pelirubio del cuello.

-Gracias por iluminar mi oscuro mundo Kookie...

-Gracias a ti precioso, por dejarme ser la luz que lo ilumine.

-Te amo...- susurró Jimin acercándose.

-También te amo cariño...

Sus labios se unieron moviéndose lentamente.

Puede que el pasado de Jimin no haya sido el mejor, pero su presente sí, y eso era lo único que importaba.

Al final, luego de una tormenta, siempre saldrá el sol.

🐥🐰

Explicación + agradecimiento.

¡Hemos llegado al final definitivo! Espero que les haya gustado la historia 💛, como pudieron observar es realmente corta, pero de eso se trata.

Quiero agradecerles ya que llegamos a las +600 vistas y +100 votos. Realmente aprecio que disfruten la historia y pido disculpas si no fue lo que esperaban, prometo esforzarme más 💙.

Tal vez muchas no entendieron en sí la historia ya que en la descripción pone que Jungkook es un idiota; con idiota no me refiero al típico chico malo que hace sufrir siempre a Jimin y la caga en todo, no, Jungkook no era esa clase de idiota.

Él más bien era un idiota debido a que en un momento decidió poner primeramente a otras personas desconocidas que a Jimin, dejándose llevar por los malos comentarios y dejándolo solo a Jimin. Prefirió observarlo desde lejos así no pensaban mal de él pero falló en ello por lo que decidió apartarse.

Básicamente con esto quiero dejar en claro que no hay que dejarse llevar por los malos comentarios de las personas, haz lo que tú quieras hacer sin necesidad de dejarte llevar por otros que solo quieren verte caer, la gente juzgona siempre va a existir y por eso jamás hay que darse por vencido, ya que en un segundo puede ser muy tarde para todo.

De igual forma si tienen alguna duda pueden preguntarme.

En fin, agradezco nuevamente que se hayan tomado el tiempo de leer esta mini historia 💛

Adiós 💙.

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