I Missing Your Face 『 국민 ¦ Kookmin』

♡;Capítulo 12

"Hola, a pasado un tiempo."

Para tí, user40826186 ya que me pedías seguir con mi sufrimiento xd.

JiMin había sido cordialmente invitado a pasar un día completo con JongIn. El moreno le había invitado a su humilde casa, paso una semana lenta y torturosa. El tener que convivir con JungKook, en la casa donde estaba viviendo con su madre.

JungKook salía de casa, y regresaba a altas horas de la madrugada. Con el cabello despeinado, la ropa arrugada y algunas marcas en su cuello con labial rojo.

El azabache, únicamente estaba enrolladito en su cama, llorando tan débil y destrozado. Cómo cualquier noche, se dedicaba a llorar como nunca, preocupado por la seguridad de Jeon. En la mañana, todo cambia radicalmente, la preciosa sonrisa de JongIn, cambia absolutamente todo.

Se detuvo frente a la puerta de la casa del moreno, tocando suavemente la madera y escuchar la voz de JongIn, sobre todo ser bien recibido por él. El moreno traía una camisa de mangas (que estaban arremangadas por cierto) blanca, un pantalón negro, al igual que sus zapatos.

Un toque entre elegante, y sexy al ver sus brazos que se le remarcaban las venas.

—Oh JiMin, —dice el más alto, admirando la belleza inigualable, del pálido—. Adelante, acabo de terminar de limpiar mi hogar.

JiMin asintió tímido. Y entró a la sala de estar el moreno, los colores eran alegres, cuadros en la pared con imágenes de la familia de JongIn adornando las paredes, el piso de madera y con una alfombra suave para que al caminar de los invitados, sea cómoda.

—¿Estás listo? —preguntó Kim.

—Sí, —dice entre susurros Park—. ¿A dónde iremos?

—Al parque de atracciones de Seúl, —respondió colgando el blanco mandil, secarse sus manos y tomar un suéter blanco y su chaqueta que era color entre gris café—. Sería una buena idea ir juntos. Pero antes.

El moreno tomo un pañuelo, rodeando la suave tela en la cara de JiMin.

—Tengo que enseñarte algo muy importante —aseguró el moreno, tomando la pequeña manita de JiMin y entrelazando sus dedos tímidos—. No es nada malo, te encantará. Te lo aseguro.

JiMin asintió tímido. Y JongIn comenzó a caminar, no tan rápido para que el azabache no se asustara, se tropezara o algo por el estilo.

Aunque si se tropezara, no dudaría en atraparlo.

El moreno paró, y Park se detuvo
a su lado.

—Pon tus brazos al frente, —Kim pidió—.  Abre tus manos, por favor.

Park hizo caso nervioso, estirando sus brazos hacia enfrente, y abrir sus manitas.

Un peso se sintió después de unos minutos. Algo peludo y pequeño que ronroneaba.

JongIn desató la tela de los ojos de JiMin, dejando que el azabache se acostumbrara a la luz, y viera lo que tenía en manos.

Un gatito de color, con la espalda gris, blanquito en la pancita y patitas. Pequeñito e indefenso.

—El es Viyeon, —dice el moreno rápidamente—. Un gatito que vino a parar en mi casa, pero realmente no pasó mucho en casa.