Tensei Shitara Slime Datta Ken (WebNovel)

Capítulo 36 - Participando en la Guerra

Tres días han pasado desde que nos fuimos. Habíamos sido capaces de llegar a los pantanos.

Ya que no podía reponer nuestras reservas de agua en el camino, había utilizado el agua en mi estómago, pero parece que también se han llenado con poder.

Ahora que lo pienso, ya que constantemente fluye dentro de mí poder mágico, esto puede ser como un efecto de adquirir agua.

Al salir nos hemos centrado en minimizar el equipaje para maximizar la velocidad. Gracias a eso, pudimos llegar antes de lo esperado.

Antes de continuar nuestro avance debemos confirmar la situación actual.

La reunión con el Jefe de los Hombres Lagarto está prevista para mañana, y todavía no tenemos un motivo para inquietarnos.

Por lo tanto, les pedí a todos que tomen un descanso. La tensión lleno el aire. Ahora, para el reconocimiento...

— Rimuru-sama, voy a ir.

Souei se ofreció inmediatamente.
No llevaba ninguna armadura. En cambio, él llevaba una cota de mallas tejida de mi hilo de acero.

No hay duda sobre ello– fue hecho por la agilidad.

Según él, "¡no seré golpeado, así que no hay necesidad!" Tales fueron las palabras petulantes y enérgicas de este chico guapo.

Ya veo... Me las arreglé para responder.

Esta vez también, puedo confiarle esta misión con confianza.

— Está bien entonces, Souei. Ve, confirma la situación para mí.
¡Si es posible, observa bien la habilidad del jefe cerdo!

Diciendo eso, lo envié.

Seguramente, descubrirá muchas cosas interesantes con su muy alta capacidad.

— Rimuru-sama, ¿le importaría si nos alborotamos como nos guste esta vez?

Benimaru había preguntado.

Francamente, ya que no tenía idea acerca de la situación no podía decirlo. Por lo tanto,

— ¿Hmm? No me importa, pero podrán retirarse adecuadamente una vez que lo ordene?

Dije eso.

Benimaru lucía una sonrisa sin miedo.

— Esa señal, ¿creo que sería innecesaria? Después de todo, ¡será aniquilación! ¿No?

Tal confianza en uno mismo. ¡Tú también, eh! Así pensé.

Los buenos hombres están llenos de confianza, así es... si ganamos...

¡Actuar todo presumido pero perder de todos modos! Si esto ocurriera, la vergüenza sería intolerable.

Este tipo probablemente no se preocupa por esas cosas, ¿no? Oh bueno.

— No seas descuidado, ¿de acuerdo?

Le dije, y terminó la conversación encogiendo los hombros.

Shion estaba en trance, admirando su espada. ¡Pronto a ella se le permitirá armar un alboroto como le guste! Una sonrisa apareció en su rostro.

Si no hubiera sido tan boba, ella seria alguien genial.

Esa chica, embelesada con su espada, hace una expresión realmente peligrosa. Vamos a actuar como si no lo hubiéramos visto, eso haremos. Es lo mejor para mi salud mental.

Como se esperaba de Hakurou, estaba tranquilo como de costumbre o debería decir: tan brillante y limpio como un espejo de acero, verdaderamente una presencia digna que proviene de una persona experta.