Odio

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Julie seguía sin tener algún avance con Hoseok, además de eso tenía el presentimiento de que la consideraba más como una amiga que como una posible amante.

Miró a su teléfono una vez más y se debatió en si llamarlo o no, aunque probablemente le preguntara como consiguió su número.

«Pensara que soy una acosadora»

Julie suspiró y se revolvió en la banca mientras miraba el cielo, una arruga se formó en su rostro al notar que había mucho sol, cosa que ella odiaba.

Desde su estadía en Japón había olvidado por completo tardes así, se había sumergido tanto en el trabajo que empezaba a cuestionarse si pasaba tanto tiempo en ese mundo por amor a su trabajo o por la falta de sociabilidad que había desarrollado.

Jeongin miraba a la chica desde la rama de un árbol con mucha cautela, debía de admitir que estaba muy encaprichado con la chica, aunque consideraba que estar en esta posición era poco usual para él y más cuando las personas lo miraban raro, miró con frustración a la chica a su lado.

— ¿Cómo es que me convenciste de subir a un árbol? —se quejó mirando su posición.

— ¿Cómo es que no sepas trepar un árbol?— refuto Layla acomodándose en la otra rama mientras limpiaba sus manos —. Además tú fuiste quien pidió mi ayuda.

— Nunca pensé que me harías subir a un árbol para verla, no es normal.

— Primera cosa que debes saber, conmigo nunca suceden cosas normales. — dijo Layla haciendo un ademán.

Jeongin suspiró mientras negaba.

— Hubiese sido mejor si me la presentaste — dijo Jeongin mirando como la chica se enojaba al perder su juego —. Habría sido un buen comienzo.

— Esa era mi idea pero en cuanto  te paralizaste al verla y no respondías cuando te hablaba, considere que esta era una buena idea. — dijo Layla mientras miraba al joven.

Jeongin sonrió al escucharla consideraba que a pesar de que tenía una malas ideas al menos ella trataba de ayudarlo. Sin embargo consideraría las cosas

— ¿Por qué serás tan imprudente? — dijo Hyunjin y la chica volco los ojos.

— Con un simple gracias por ayudarme seria suficiente. —dijo Layla sonriendo. 

Jeongin sonrio y estiro el brazo para abrazarla. Layla sonrió y correspondió al abrazo pero luego una pregunta asalto su mente, palmeo el brazo de Jeongi y levantó la mirada para verlo.

  — Tengo una pregunta — dijo Layla a lo que el chico la soltó y la quedó mirando.—   ¿Cuántos años tienes?

Jeongin sonrió nervioso y desvió la mirada.

  — 17... ¡Pero pronto cumpliré 18 y podré estar con ella!— se apresuró a decir Jeongin.  

Layla lo miró sorprendida, se había equivocado al juzgarlo por su apariencia o sea no tenia cara de adulto al igual que los chicos pero debía suponerlo.

  — Jeongin eres demasiado joven para estar con Julie, ella tiene 22 años — dijo Layla aún sorprendida — . ¿Cómo es siquiera que estabas trabajando en la empresa?

Jeongin vacilo antes de responder tratando de pensar si lo que iba decir era bueno o no.

  — Tengo un amigo ahí que es bailarín y me ayudo a conseguir un puesto como pasante en la oficina y fui ascendiendo poco a poco.— explicó Jeongin.

— Pero eres un niño, ellos no pudieron simplemente contratarte.... — Layla detuvo sus dudas al conectar los punto y regreso su mirada de forma desaprobatoria al muchacho — .No me digas que falsificaste documentos — dijo Layla entonces Jeongin sonrió de formo inocente—¡ Yan Jeongin In, eso esta mal!

You're my biasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora