Tobecca: EL FANTASMA DE LA ÓPERA

Se cierra el telón

Al despertar Muji se sorprendió al estar en su cama y más aun viendo a su amo velando por él.

-Por fin despiertas... no sabía que estabas ahí... me... alegra que estés bien ¡por poco y te mato!

-¿Dónde está Pucca? Y Garu...

-Ella escogió la llave dorada, está dispuesta a casarse conmigo con tal de salvarlos. Le pedí que me besara y sabes... no dudo... fue la primera vez en mucho tiempo que alguien me besaba. Ella me quitó la máscara y no me rechazo... beso mis cicatrices y lloró.... Lloramos juntos...

-¿Dónde están?

-Supe que no podía retenerla más. Le dí mi anillo como regalo de compromiso para ellos. Estan bien y creo ahora lejos de aquí. Pero ella volverá pronto sabes le pedí que... cuando escuchase de mi muerte me devuelva el anillo así... mi alma descansará en paz....

Yo estoy muriendo Muji.... ¡muero de amor!

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Ha pasado apenas una semana desde lo acontecido...

-¿Qué tienes Pucca? Sigues pensando en...

-Sí, no puedo olvidarme de él. Sabes yo hubiera dado todo por estar aquí como lo hago justo ahora contigo, sentir la esta arena en mis pies, sentir esta brisa marina nuevamente en mi rostro, pero... me siento.... VACÍA...

Las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos y por más que intentase palabras era inútil.

-Lo amas... no es así...

-Garu yo... lo lamento...

-Shhh!!

"No tienes que lamentar amar a alguien, ese sentimiento guárdalo te pertenece y no soy quien para quitártelo. Me duele no ser el causante de esas lágrimas (hablando en buen sentido) quisiera ser parte de ti pero en tu corazón vive alguien más y no soy yo. Siempre estarás en mi corazón"

O al menos quiso decir todo aquello que pensaba sin embargo solo pudo esbozar una sonrisa y decir –Ve con él.

Al llegar al teatro grande fue la sorpresa de la azabache al ver que estaba cerrado, sin la prima Donna las ventas para la ópera disminuyeron además él no quería abrir las puertas de aquel lugar que le traía tantos recuerdos.

Como pudo se las ingenió para entrar al teatro por una puerta que estaba bien atrancada. Al entrar la nostalgia invadió su cuerpo, por fin estaba en casa. De repente oyó una voz cantar -¡Maestro! La joven azabache se acercó lo más discreta posible para apreciar aquella melodía tan triste, pero no duró mucho tiempo...

-¿Quién anda ahí? El lugar está cerrado...

-Maestro...

-..Pu...tu... que...como...yo...

-Lo extrañaba mucho. Creo... que después de todo...usted me ha embrujado...

Pucca subió al escenario hasta estar frente a frente, no llevaba mascara así que pudo apreciar aquel rostro. Tobe pudo ver en sus ojos un nuevo sentimiento, no era pena, tampoco tristeza u horror... era calidez y ternura... Sin resistirlo más depositó sus fríos labios en los rosados y finos labios de ella, los besos eran cortos pero cargados de inmensa ternura y poco a poco la pasión fue aflorando con besos más profundos y tibios.

-Espera... yo...

-¿Sucede algo?

-Aún no se tu nombre....

-Por algo tan trivial me separas de tus hermosos labios?

-Bueno es que... yo...

-Mi dulce palomilla, puede decir cariño o amor mío, pero si mi nombre deseas saber este es TOBE...

-Tobe....

-Así es ... dilo otra vez...

-Tobe....

Fue así como Tobe llevó a su amada a su recamara para continuar el amor que surgía entre ellos ¿A caso era un sueño? De ser así ninguno deseaba despertar...

-Espera...

-Y ahora....

-Yo no sé si estoy lista para esto, no sé nada y...

-Shhhh.... Amada mía tu estas hecha para el amor... tu cuerpo sabrá que hacer...

-Tobe....

:::Advertencia: Un poco de lemon, si no te gusta no lo leas:::::::::::::

Sentir la piel de su amado la hacía sentir bien, esas manos grandes marcadas por algunas venas recorrían su cuerpo como si trataran de estudiarla cuidadosamente, ver qué lugar le causaba más placer... la cintura...las piernas .... el cuello... Ahora ella con mucha vergüenza, pero con anhelo recorría con sus manos delicadas el pecho de Tobe, podía sentir su lado firme y su lado maltratado por aquellas cicatrices profundas examinando cada una notando que ese lado era el más sensible de todos. Tobe y Pucca por un momento se quedaron sentados... viéndose fijamente a los ojos perdiéndose en el alma del otro, a continuación, con una mano colocó su miembro ya erecto en la entrada de Pucca y muy despacio para por fin entregarse al amor.

Se dice que si algún día vas al teatro del fantasma de la ópera te deleitaras con la magnífica voz de la cantante y si prestas suma atención notaras que no canta sola.