Capítulo 1. |El single del año.

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Algunas veces, sientes que te levantas con el pie izquierdo, y todo te sale mal. Para mí, levantarme de esa manera, es signo de todo lo contrario.

Me gusta mi lado izquierdo. No sé, siempre ha sido así, sin razón alguna. Y definitivamente,este día ha sido bastante bueno.

Doy una hojeada a mi libro de John Katzenbach, que estoy casi por terminar. No me ha dejado dormir los últimos dos días, y juro que si no estuviera en exámenes, lo hubiera leído en una sola noche.

—¡Hey! ¿Empezaste a comer sin mí?— la voz de Mafer, mi mejor amiga, logra sobresaltarme una vez más. (Ella siempre llega sigilosa y hace que brinque del susto).

—Perdón, ¡tenía mucha
hambre!—respondo sincera, ante mi plato vacío.—¡La ensalada de pollo estaba deliciosa!—

—Pues yo prefiero algo más grasoso, ya me conoces. Por cierto, traje también para tí.— dijo, sacando la comida de la enorme bolsa de Carl's Junior.

—¡Qué ricooo, hamburguesas!—

—¡Ay sí, tenía mucho antojo! Por cierto, ¿supiste que ya hay ganadora del concurso de Heo?—

—¡¿En serio?! ¡Aahh, debe ser una buena foto, definitivamente!—

—Pues yo tenía otras preferidas, pero no está mal. Mira.—

Mientras mirábamos la foto ganadora en el blog del concurso, pensaba en lo afortunada que era esa chica. No solo tendría el nuevo single de Young Saeng firmado, también cenarían juntos, así que sentí un poco de envidia.

Dos semanas atrás, una de las estaciones de radio más populares en Corea, había lanzado la iniciativa.

Selfie, el nuevo single de Saeng, estaba en los número uno de las listas de popularidad, tanto de ese país, como en Japón, y muchos otros. Y no era para menos, la canción era ideal para bailar, y la letra era divertida y pegajosa. Y bueno, ¡el título era digno del rey de las selfies!

—¡Esa tipa sí que tiene suerte, ¿eh?— la voz de mi amiga me volvió a la realidad.

—¡Ya sé! ¡Lo que daría yo, por tener esa oportunidad...!—suspiré.

—¡Yo mataría por tenerla, pero con Min o Kyu, ya sabes, mis dos amores!—

—¡Eres una adúltera! Deberías decidirte por uno solo.—reí.

—¡Ash! Yo no te digo nada, y amas a los cinco.—

—Bueno, eso es verdad. Son mi grupo favorito, y no tengo preferencia por ninguno. Aunque lo tuyo, sí que es intenso.—

—¡Clarooo! Si cualquiera de ellos me pidiera una noche de pasión, se las daba sin problema. ¡Juntos o por separado!—

—¡Jajajaja, sí te creo!— reímos y seguimos comiendo, mientras hablábamos del próximo examen.

María Fernanda, era una estudiante de intercambio, había venido de Perú a visitar a unos familiares, y se enamoró de México, así que decidió aplicar para estudiar aquí la universidad. La conocí el primer día de clases, cuando no encontraba un pupitre vacío, y ella me hizo señas, avisándome que había uno desocupado justo a su lado.

Su personalidad era muy parecida a la mía, y congeniamos de inmediato. Pero lo más lindo, fue cuando al estarnos conociendo, descubrimos que las dos éramos TripleS. Teníamos años de seguir a los chicos de SS501, y eso fue clave para convertirnos en inseparables. Tanto, que a los pocos meses, decidimos compartir departamento, y ahora nuestra amistad era más fuerte que nunca.

Es genial poder escuchar a los verdositos a todo volumen, sin que a tu compañero le moleste, y ese nunca fue un problema aquí. Compartíamos el sueño de poder viajar a Corea al finalizar la universidad, así que las dos trabajábamos medio turno para ahorrar, ella en una cafetería, y yo como recepcionista de un conocido dentista. Nada que ver con nuestra carrera de Negocios Internacionales, pero bien valía la pena por hacer realidad nuestro más grande sueño.

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*Mientras tanto, en Corea.*

—¡De verdad que ese concurso fue un éxito! ¡Se recibieron cientos de fotografías, no solo locales, si no de países cercanos. Fue una decisión difícil.—

—El plan de mercadeo funcionó maravilloso, el single no solo se ha mantenido en los primeros lugares de las listas. Ha sido de lo más buscado en internet, y las ventas han aumentado en un
60%.—

—Respecto a eso, tenemos una propuesta que  hacerles.—

—Somos todo oídos, ¿verdad, Heo?—

—¿Eh? Sí, díganos qué
propuesta.— miré al CEO de la radiodifusora y a mi manager.

—¿Qué pasaría si extendemos la dinámica, no solo para las fans locales? ¿Te imaginas incluír a las extranjeras? ¡Eso ayudaría a incrementar el marketing a nivel mundial!—

—Déjeme ver si estoy entendiendo bien. ¿Lanzarán la misma propuesta para todo el mundo? ¿No le parece demasiado ambicioso?—

—Así son los negocios, tú lo sabes mejor que nadie. Ambos seremos beneficiados, tú, con lo ya mencionado, y nosotros, posicionarnos en ese mercado con  el nuevo blog. Tenemos bastantes ideas, y queremos expandirnos. ¿Qué te parece?—

—Bueno, sin duda es un plan ambicioso, lo que se espera es muy bueno, pero ¿no le parece demasiado? Digo, ¿qué tal si la foto ganadora es de alguien que vive al otro lado del mundo? Los gastos serían un problema.— la idea me gustaba, pero necesitaba asegurarme de que quien resultara ganadora, tuviera el mejor trato posible.

—Todo está cubierto. Se pagará el 100% de los viáticos, y se proporcionará un guía para apoyar si es que no hablan nuestro idioma. Sabemos lo extremo que podría ser viajar a un país extraño solo, así que la persona ganadora podrá viajar con un acompañante. Se le darán todas las comodidades y atención debidas, solo es cuestión de que digas que sí.—

—¿Tienes el plan por escrito?— preguntó mi manager, adelantándose a mis pensamientos.

—Sí, aquí lo tienen.— dijo, extendiendo una carpeta a cada uno.— pueden leerlo con calma, y disiparé cualquier duda. El premio además del viaje, sería el mismo que con la ganadora local. Si aceptan, la convocatoria se lanzaría hoy mismo en redes, y en un programa especial de una hora, hoy por la noche.—

—¿Lo tienes todo bajo control, cierto?— reí.

—Es una buena propuesta, imagina la felicidad que le darás a una de tus fans.—

Sin duda, era un excelente regalo. Hacía tiempo que no hacía un tour en el extranjero, y de alguna manera, me sentía en deuda. No es mi fuerte socializar con desconocidos, pero mis fans se merecen que de lo mejor de mí. Creo que es una buena opción.

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—Pues bien, ese es el último trabajo para calcular su promedio. Sean creativos, jóvenes. Lo necesito para pasado mañana en mi correo, y si lo apruebo, exponen al día siguiente. Que tengan buenas tardes.—

--¡¿Es en serio?! ¿No podía pedirnos algo más acorde a su materia?-- susurré a Mafer, quien veía su celular con ojos de amor.

—¡Aaahhh, Min está cada día más guapo! ¿Qué me decías?—

—¡Que me choca que el profesor de Desarrollo de Empresas Innovadoras, quiera que la innovación sea con nosotros mismos! Eso no está tan mal, pero, ¿una selfie que invite a los clientes potenciales a darnos el proyecto? ¿Acaso es fan de Young Saeng?—

—¡Jajajaja! ¡Seguramente mandó su foto y no ganó! ¡Jajajaja, ahora sí me hiciste reír, amiga! No sé porqué no te gustan las fotos, eres muy bonita.—

—¿Tal vez porque salgo fatal? ¡No soy nada fotogénica! Siempre salgo mal en todo, ¡me choca!—

—Pues esta vez va de por medio tu calificación, así que deja de lado si te gusta o no, y haz lo mejor que puedas. ¿Ya pensaste en algo?—

—No tengo ni idea, pero ya se me ocurrirá. ¡Ni modo!—

Después de todo, mi día ya no estaba siendo tan perfecto.

Continuará...

Selfie | Heo Young Saeng Donde viven las historias. Descúbrelo ahora