Selfie | Heo Young Saeng

Capítulo 11 | El amor no se puede ocultar.

POV YS.

¿Cómo es que me dejé llevar por mis impulsos? Ahora me siento tan frustrado con esto, que recuerdo de la peor manera el porqué siempre suelo contenerme. Para no sentirme como me siento, justo en este momento.

—... y también los cerdos vuelan, ¿verdad? ¿Los has visto?—

—¿Eh? Sí, sí...—

—¡Lo sabía! No has puesto atención a nada de lo que te he dicho, ¿verdad? Te dije que los cerdos volaban, y respondiste que sí. ¿Qué es lo que te pasa, YoungSaeng? ¿Hay algo que te preocupa sobre el trabajo? Todo va bien, te lo aseguro.—

—No, Joon. Todo está bien. Sólo... me distraje innecesariamente.—

— Está bien si no quieres hablar de ello, pero no me mientas, que te conozco bien. ¿Qué es lo que querías decirme?— preguntó, al tiempo que daba un trago a MI café. Pero no es como que lo quiera ahora, ya no.

¡Mierda! ¿Para qué abrí la boca? Sé que igual debo hacerlo, pero no estoy del mejor humor para hablar de esto ahora.

—Bueno, estaba pensando... ¿qué tal una gira internacional? Nada grande, ya sabes, conciertos en lugares pequeños, donde pueda estar cerca de mis fans. Pensaba en algo tipo unplugged...— ya estaba hecho. Sin importar el porqué de mi iniciativa. Y en el fondo, sabía que se los debía a todas.

—¿Y qué fue lo que te hizo pensar en esta repentina idea? Lo planteamos hace meses, pero no estabas muy entusiasmado.—

— Bueno, no es que no lo deseara. Pero primero debíamos ver la respuesta al nuevo material. Muchas cosas cambiaron desde entonces, así que me pareció buena idea hacerlo.—

— ¡Y sí que cambiaron! Y veo que para bien. Antes no me traías café...—

— Joon...—

— ¡Jajaja, es broma! Me alegra que pensaras en ello, creo que es tiempo. ¿Qué países tienes pensados?—

— No lo sé, aún no estoy muy seguro. Pero podemos empezar aquí, y seguir a Japón, aunque mis pensamientos principales están en Latinoamérica.—

— Obviamente, México.—

— Está en Latinoamérica, ¿no?—

— Creo que ya sé de dónde viene tu deseo. Tu chica Selfie tiene qué ver con esto, ¿no?—

—¡No, nada! — definitivamente, no estaba de humor para seguir con la conversación.

—Oye, ¿qué pasa? Es lógico que a raíz del concurso recordaras que tus fans están esperando por tí en lugares muy lejanos. ¿Por qué estás de tan mal humor?—

—Lo siento, no dormí muy bien. Mejor hablamos después.— me levanté, y caminé sin vacilar hasta la puerta.

— ¿Sigues sin poder dormir? Te dije que podemos hacer una cita con...—

—¡No! Estoy bien, ¿ok? Hablamos después.—

Salí sin dejar que dijera nada más. Ya sabía lo que me repetiría. La "asombrosa" idea de buscar ayuda profesional, para tratar mi insomnio. Es lo menos que necesito escuchar ahora. No debí haberme levantado siquiera.

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Habían pasado varias horas, y seguía tratando de concentrarme en la música para la nueva canción en la que tenía tiempo trabajando, aunque no había tenido ningún avance.

Lo único que ha salido bien, fue esa llamada a Sun Hee. Sonreí al recordar lo fácil que fue manipular un poco las cosas a mi favor. Me sentí un poco culpable, pero ya estaba hecho.