Persiguiendo a mi Amor en Multiuniversos de Fantasía

Mundo de Sirenita: Misión - Obtener el material especial para la hechicera II

Feia observó la carta por unos segundos más y finalmente cuando decidió guardarla escuchó una chirriante voz cerca a su oído.

"Quién podría pensar que Luna sería tan insidiosa y mentirosa. Bueno no es como si Alexis fuera a prestarle atención alguna vez".

Ella observó de soslayo a un gracioso cangrejo naranja posarse en su hombro, mientras realizaba comentarios déspotas sobre su supuesta mejor amiga.

"Ya te he dicho que no te escondas en mis pertenencias, Marshal"

"Jejeje"

Marshal le dedicó una "tierna" sonrisa que no se vislumbraba en su rostro de cangrejo, para ser perdonado por su amiga.

Pero Feia no sería fácilmente convencida y le dirigió una mirada malhumorada al pequeño cangrejo travieso.

"Feia sabes que no podía dejarte ir a un viaje tan riesgoso sola" dijo con una voz tristona para luego frotar la mejilla izquierda de la jovencita con su duro caparazón.

"..."

Feia se preguntaba interiormente si era fácilmente influenciable, ya que perdonó a Marshal por su travesura e incluso le pareció tierno su accionar.

"Está bien, pero no lo vuelvas a hacer. Podría ser peligroso si en alguna oportunidad terminaras perdiéndote."

Marshal se sintió tan feliz que dio pequeños saltitos en el hombro de Feia, para luego pasar a seguir hablando con una actitud despectiva sobre el destestable comportamiento de Luna hacia ella.

A Feia le pareció graciosa la actitud del pequeño cangrejo, por lo cual dejó que siguiera hablando sobre Luna.

"No debes permitir que te afecte lo que diga Luna, Feia. Tú eres a quién en verdad ama Alexis"

Lo que dijo Marshal, petrificó por compelto a nuestra querida protagonista... ¿Qué Alexis la amaba en realidad a ella? Por qué habría de importarle saber aquello...

Pero al ver la mirada reconfortante de Marshal dirigía hacia ella... recordó que había olvidado un pequeño detalle. En esta línea de tiempo, Feia tenía un amor imposible y ese era su mejor amigo.

Cuando ella descubrió que su amiga más cercana también lo amaba, dio un paso al costado, ya que no deseaba perder a ninguna de las personas que valoraba.

... Por lo cual no lucho por este amor imposible y decidió guardar sus sentimientos en su corazón...

Cuando recordó esto, sintió que debía expresar algún sentimiento de malestar para que Marshal no notará nada extraño en ella.

Agachó lentamente la cabeza y permitió que pequeñas lágrimas cayeran de sus ojos. Marshal al verla reaccionar así, se sintió incómodo y trato de recordar alguna historia graciosa que pudiera acabar con las lágrimas de su amada amiga.

"Feia...recuerdas la historia que contó Alexis sobre mí..."

Ella levantó suavemente la cabeza, se veían sus hombros temblorosos y en su rostro se podían apreciar las brillantes lágrimas almacenadas en sus atractivos ojos azules.

Marshal no supo que decir...por alguna extraña razón, desde hace unos meses, sentía que Feia ya no era la misma persona de antes.

Su actitud y el aura que la rodeaba estaba llena de una elegancia natural, como si ella fuera una reina que gobernó por mucho tiempo, incluso al llorar se veía tan elegante.

No podía negar que la actual Feia irradiaba una belleza madura para alguien de su edad, pero sentía que a comparación de la pequeña niña impulsiva y temperamental de meses atrás, prefería a la princesa de ahora que podía conquistar los corazones de sus súbditos con una deslumbrante sonrisa.