Mundo de Sirenita: ¡¡Ha sido maldecida!!

626 98 2
                                    

Marianne sostuvo con delicadeza la nuca de la princesa Feia, revisó su boca y palpó su cuello. Con un aura de gracia y confianza absoluta en sus habilidades, sacó de su maletín un frasco pequeño y aplicó una crema roja sobre la herida en la nuca de la princesa.

Feia sintió un leve ardor, lo cual la sorprendió levemente ya que la herida había cicatrizado, no debería sentir algun ardor o dolor.

Pronto pudo visualizar como su nuca brillaba fuertemente, cerró los ojos por unos instantes y cuando volvió a tocar su nuca la cicatriz sobre ella había desaparecido.

Afirmó en su corazón que está era la verdadera capacidad de una hechicera, ella había visto a varios aprendices de hechicería tratar heridas y moretones, pero nunca vió algún medicamento que tuviera este tipo de eficacia.

En su corazón se desarrollo un gran respeto por esta sirena y este respeto iba creciendo a medida que era tratada.

"Princesa, por favor tomé este medicamento" dijo Marianne.

Recibió de la hechicera, una pequeña botella con un extraño líquido de color verduzco, cerró los ojos y pensó en su amado, para finalmente con firmeza beber el líquido en la botella de un trago.

Tal y como lo había previsto, el líquido en la botella era muy amargo... pero si con ello podía regresar su voz lo aceptaría.

Abrió lentamente los ojos, mientras sentía como todo su cuerpo se revitalizaba y observó maravillada como su cuerpo brillaba.

Sus antes delgados brazos, su anterior cabello opaco y sus anteriores escamas sin brillo habían regresado a su forma original.

Se acercó al espejo en el tocador de su habitación y observó sorprendida como había vuelto a su apariencia resplandesciente y sana de meses atrás.


"Much------" gracias


Feia sostuvo fuertemente su cuello y tuvo un mal presentimiento, había intentado agradecer a la hechicera principal, Marianne, por su ayuda al curar su cuerpo y restaurar su voz.

... Pero simplemente no podía... no podía hablar.

Dirigió su mirada a la hechicera Marianne y esta movió su cabeza de lado a lado.


"Mi princesa me es imposible tratar el problema de su voz...curé sus cuerdas vocales, pero el problema para hablar no proviene de la herida..."


...Entonces, ¿De dónde se origina este problema?


Transmitió Feia a través de las ondas sonoras, mirando fijamente a la hechicera sin perder ningún movimiento en su rostro.

"Esto podríamos llamarlo... una maldición... usted ha sido maldecida princesa Feia"

Feia sintió que todo su mundo se desmoronaba, con un atisbo de esperanza se acercó al espejo y vislumbró su nuca a través de este.


...pero no había nada ahí, solo su delicada nuca sin ninguna cicatriz



...ni ninguna marca.


Feia cayó rendida al piso, sintiendo que ya no tenía fuerzas para vivir, el camino frente a ella se veia oscuro y sin salida.



"En verdad, lamento no poder ayudarla, princesa Feia" dijo Marianne cabizbaja.



Con esas palabras dichas, el grupo que esperaba afuera de la habitación ingresó, las princesas nadaron hacia su hermana pequeña y la refugiaron en sus brazos.

Persiguiendo a mi Amor en Multiuniversos de FantasíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora