❝Desde la pequeña infancia de un joven albino, suspiraba todas las tardes por quién era su gran amigo. Ante su declaración de amor, algunas aventuras raras y malas pasaron, así logró perjudicar algunas amistades. Al igual que aquello brindo nuevas...
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-N-No sé de qué h-hablas...- hizo un ligero puchero y miro hacia otro lado, se estaba muriendo internamente. Quería salir de ahí corriendo lo más rápido posible.
-¡Oh vamos, tu lo sabes!¿¡Qué me están ocultando!?- Le estaba hartando la situación, pensó en irse pero, su curiosidad por saber era mucha; no quería quedarse con la duda.
De la nada, alguien grito los nombres de ambos jóvenes que se encontraban ahí. Su voz era algo desafinada y fuerte, era Trollino quien los llamaba desde lo lejos acercándose corriendo para hablar con ambos.
-¡Rius, Timba!-
-Lo que me faltaba, que Trollino vinera, uhg...-Se hablo a si mismo, que incómodo era estar ahí, su secreto estaba a punto de ser revelado ante la persona que tanto amaba. No sabría la reacción de este y esto le daba miedo a ser rechazado o insultado.
-¡Timba!¿Ya le preguntaste?-Su voz era agitada, estaba cansado por correr hasta tal lugar.
-No me quiere decir lo que pasa, se está haciendo al difícil- Frunció el ceño fastidiado, mirando de mal manera al albino.
-¡Nunca le diré nada sobre...!¡bueno, ya sabes!-Su nervios aumentaban, oh demonios.
-¡Si tú no lo haces, yo lo haré!- Sentencio sin más, era momento de que supiera la verdad el peli azul.
-¡Ni se te ocurra!- Grito, quería tirarse al vinagrito y darle un golpe para que se callara, pero por más que quiera no podía, no tenía el valor suficiente para hacerlo. No quería perder una amistad por un simple secreto.- N-No sé te ocurra...- Su voz se escuchaba algo entrecortada, quería llorar.
Timba quien sabía que el albino lloraría, fue a abrazarlo con la esperanza de que se calmará.
-No se te ocurra a d-decirle...que lo amo con toda mi a-al...- Repentinamente abrió sus ojos, lo había dicho. Que vergüenza, quería morir en ese momento. Se soltó del abrazo del peli azul, este le miraba confundido parecía estar en shock.
-¡Lo dijiste, tú lo dijiste!¡Jajaja!- Se burló, oh vaya momento para reírse. En cambio el albino empezó a llorar, se sentía apenado. No lograba pensar con claridad, tan solo miro de reojo a Trollino y a Timba para luego salir corriendo. Era la manera más eficiente para salir acabar la situación incomoda, o eso creía.
Mientras tanto, Timba reacciono buscando a Rius quien hace un momento se había ido. Estaba más que confundido no sabía cómo sentirse en aquel momento.
-Él, Él...¿Dijo que me amaba?- Dirigió su mirada al amante del café, quería confirmar una vez más lo que había oído hace un momento.
-¡Claro que lo hace!¡Por eso, el es muy amistoso contigo!-Dijo con una gran sonrisa en el rostro, le emocionaba sobre lo que pasaría después. ¿Rius sería correspondido o rechazado?¿Morirán?no lo sabía, muchas ideas se le venían a la mente, wow tantas escenas se imaginaba.
