Reencarnando en una Loli R!

¿VIVIR JUNTAS?

¡De ninguna manera dejaré que ella se quede!

-¡Largate! -La empuje pero mi fuerza era inútil.

-¿Que estas haciendo?

-Intentaba sacarte de aquí pero creo que no puedo hacerlo... ¡Tu tienes la culpa!

-¿Y porque yo? -La pregunta no era necesaria si ya sabe lo que me hizo.

-¡Por ti es que tengo esta forma tan... Patética! ¡No pedí eso!

-Ya veo así que es por eso... -Se acercó a mí y me abrazo.- Pero ahora no habrá problemas si estamos juntas.

-¡Que te pasa! ¡Sueltame! ¡¿Eres una lolicona?!

-Jeje...

-¡Fue por eso que me reencarnaste de esta forma! ¡Idiota!

-Vamos Natsuki-Chan acepta que tiene sus ventajas.

-No.- La aparte de mí.

-Fufufu...

-¡Alejate de mi!

-Si bueno, solo quería venir aquí ya que me parecias muy interesante...

-¿No eras una diosa?

-No me considero una así que no importa, después de todo no pertenezco al grupo de los dioses de alto rango.

-...

-Bien, supongo que ahora podremos vivir juntas aquí Natsuki-Chan. No te preocupes que puedo crear el dinero suficiente para pagar algunos gastos.- La propuesta parecía interesante pero no confiaba mucho en ella.

-¿Y me puedes volver a hacer hombre?

-Por supuesto que no.

-Rayos, supongo que pasaré así mi vida. Y no voy a tratar de suicidarme porque sería difícil llegar hasta donde estoy ahora...

-Si que eres algo conformista.

-No lo soy, solo soy realista y mi punto de vista es alejado de lo que una persona normal tendría. Si tú estás a favor yo estaré en contra y si estas en contra pues yo estaré a favor, por así decirlo.

-¿Que?

-Olvidalo.- Suspire y me senté tratando de aliviar el estrés por esta situación.

-¿Entonces me dejaras vivir aquí?

-Dejame pensarlo bien...

De ninguna manera dejare que una rarita como ella se quede a vivir conmigo.

-Puedo ocuparme de las labores que tengas en este lugar.- Propuso.

-¡Te quedarás entonces!

-Que rápido aceptaste...

-Eso es porque no estoy acostumbrado a hacer las labores, si te das cuenta no todo el lugar esta tan ordenado además de que ni siquiera hay comida aquí.- Le mostré las habitaciones y el refrigerador.

-Ya veo... Eres muy desordenada.

-¡No es eso! No me valdría de nada limpiar algo si se va a volver a ensuciar.

-Ay si como no...

-Por cierto, ¿cual era tu nombre?

-¡Se supone que ya te lo he dicho varias veces! ¡Mi nombre es Tenma!

-¿Y tu armadura?

-¿Eh?

-Creo que me confundi de Tenma. Pero te llamaré "Sirvienta Inútil".

-¡Tratame con más respeto! ¡Si pudiese hacerlo ya te hubiese quitado la vida!

-Como si me importara...

Seguimos platicando como si estuviésemos discutiendo mejor dicho si hacíamos eso.

Finalmente quedamos en que yo la llamaría "Maid Tenma" suena raro pero era la única forma en la que no sonara tan vergonzoso.

¿Esperaban que le dijera Tenma-San?  No le diré así a alguien que apenas conozco y mucho menos si se trata de ella.

Le indique las labores que debía de hacer. La limpieza que era prácticamente todo, además de lavar los trastes y comprar provisiones aunque eso yo lo hago.

Ahora el único problema que tendría sería que no se en que lugar podría dormir ella.

(...)

-Dormiras ahí.- Puse un periódico en el suelo.

-¡No soy un perro!

-Que más da, no hay otro lugar y no quiero que duermas en el sofá se ve muy anti higiénico.

-¿No puedo dormir contigo?

-¡Ni en un millón de años!

-Al menos dame algunas sabanas para cubrirme del frío.- Se puso a buscar en los muebles.

-No tengo más de esas cosas...

-¿Y porque no?

-¿Por que tendría más sabanas si solo yo vivo aquí? Y si las tuviese que lavar iría a comprar más o solo ir a la casa de mi madre a pedirle otras.

-Eres tan conformista...

-¡Deja de llamarme así! Maid Tenma...

-Bueno bueno, solo lo haré porque me permites quedarme aquí.

Realmente no se porque al final decidí que ella se quedase. Claro que en un principio pensé que podría hacerlo para que fuese mi sirvienta pero viendo como es ella no quiero imaginarme las cosas que hará en un futuro.

-Oye Natsuki-Chan...

-¿Que es lo que quieres ahora?

-¿No se te hace esto algo familiar? Como sí ya hubiésemos pasado por esto...

-¿De que rayos hablas?

-Olvidalo creo que solo me esta afectando tu forma de ser.

-¡Idiota!

-Fufufu...

Y es aquí cuando comienza mi nueva vida al tener que convivir con esta diosa y sirviente mía.

El verano acaba de empezar para mí.