Dame una oportunidad (Draco Malfoy y tú).

Capítulo 3 - Un idiota

Draco Malfoy

— ¿Creen que quien–ustedes–saben regrese? — pregunto con voz queda Jess mientras intentaba romper el silencio que se había formado en nuestro grupo después de que hubiéramos dejado de lado el suceso de los Mundiales de quidditch.

La pregunta fue un poco imprudente, lo sabía, ya que Freya se movió incomoda en su asiento, Blaise intento ocultar su preocupación e interés tosiendo despacio, Theodore siguió mirando ofuscado la ventana mientras Aimé resoplaba intentando parecer relajada aunque el hecho de pensar en el–que–no–debe ser–nombrado podía regresar, era un tanto aterrador y problemático, ya que la mayoría de nosotros teníamos padres Mortífagos, excepto Blaise.

Por mi parte, no me preocupaba mucho, ya que si regresaba, por primera vez en esta vida, las sangres sucias y los mestizos quedarían relegados, y las sangres pura tomarían el poder…

Ven, sucederían cosas buenas… ¿verdad?…

— Eso no se puede afirmar o negar… ya sabes… es algo… algo delicado…— susurro Freya mientras Aimé tiraba de las cortinas que se encontraban en la puerta del compartimiento, para hacer nuestra conversación más privada, ya que varios chicos de primero caminaban de ahí para allá, ajenos a lo que sucedía a su alrededor, aunque eso no significaba que no tuviéramos que ser cautelosos con una conversación como esta.

— Pero ha habido muchas pruebas… Creo que a mi padre le duele la…la «marca»…— hablo Jess mientras miraba inconscientemente su brazo izquierdo, como si ella con ese gesto pudiera ver el brazo de su padre o algo parecido.

Nadie dijo nada, pero Freya y Aimé intercambiaron miradas de intriga, como si de algún modo concordaran entre ellas, mientras Blaise y Theodore hacían oídos sordos a la conversación.

— No sé de qué se preocupan… — dije mientras me acomodaba mejor en el asiento, con una actitud triunfante, mientras todos me miraban escépticos—… no pueden negar que fue divertido lo que paso en los mundiales… ver a esos muggles volando por los aires mientras todos huían… fue estimulante…— expliqué al ver el rostro de asombro de Jess.

— No se puede negar eso…— corroboro Freya mientras sonreía un poco—… Lo importante es que si regresa ¿que pasara con nuestros padres? Por si no lo recuerdas, muchos Mortífagos ahora lo niegan… Quien–ustedes–saben puede vengarse por esto…

— Por eso se hicieron presentes en el mundial ¿verdad? Para demostrar al mundo que aún están aquí…— dijo objetivamente Aimé mientras movía elegantemente su cabello castaño por detrás de su hombro, un gesto que llamo más la atención de Theo que a mí—…Supongo que a todos los Mortífagos les está doliendo la marca… por eso pensaron en mostrar su lealtad al Señor Tenebroso… Y que mejor en un evento donde todos los magos estaban presentes…

— Además aprovecharon para dejar mal parado al Ministerio…— añadí mientras Aimé afirmaba junto conmigo.

Esta vez, todos estuvieron más relajados, aunque aún volaba en el ambiente esa sensación de suspenso que dejaba ese tema.

— Hablemos de otra cosa…— dijo de repente Freya—… ¿Escucharon lo que le paso a ______ Lauper?— pregunto con entusiasmo, mientras miraba con los ojos brillosos a Jess y Aimé…

Si, ya deben saber lo que viene…

«Los chismes de las chicas…»

Bueno, eso no me molestaba… lo que realmente me fastidiaba era el hecho de que estuvieran hablando de ________ que de alguna otra chica más interesante que la antisocial de Lauper.

«Paciencia, Draco, solo ten paciencia»

— ¿Que paso con ella? ¿Estuvo llorando de nuevo? — pregunto Aimé, quien parecía restarle interés al tema, pero por la mirada indagadora que se ocultaba en sus ojos azules, también parecía querer enterarse de todo lo que pasaba en Hogwarts mientras aparentaba no estar interesada en lo más mínimo.