Aquel que ha traspasado el Manto

CAP VI- EL MENSAJE.

Todavía temblaba mientras arrodillada junto al cuerpo de Lotor, se aseguraba de que estaba bien. Su cabeza hervía de dolor, eran demasiadas incógnitas sin resolver. Pero la prioritaria estaba delante de sus ojos.

Una vez hubo comprobado que él estaba bien, Allura se puso de pie, tenía miedo e incertidumbre de lo que estaba apunto de descubrir, miró a las pantallas que le informaban de que era un archivo seguro. Dio la orden al ordenador de que reprodujese lo último y la imagen de Lotor mirando hacia ella la abrumó, conocía esa mirada, la había visto antes, y no en el que estaba tirado junto al Lector.

- Hola Allura...-la imagen le sonrió, pero con cercanía y cariño- si estás viendo este mensaje, probablemente yo ya no estaré, pero como te prometí una vez, no dejaría de cuidar de ti nunca, igual que tu hiciste conmigo, así que supongo que esto es un Adiós.- El Lotor de la pantalla bajó la mirada- una vez que reproduzcas lo que tengo que decirte, los archivos pasarán a los ordenadores de las Armas de Gamara, solo ellos tendrán acceso, pero antes quería que lo supieses, aunque nuestras posiciones no sean las mismas.

>>Después de nuestra última discusión, tras la muerte de nuestros padres, no pude contarte todo lo que había averiguado. Me temo que los sentimientos son algo que a veces es imposible de controlar, y no te echo la culpa por todo lo que me dijiste, tanto tú como yo creíamos que nuestros padres se mataron en una batalla mientras mi planeta, Daibazaal se colapsaba, pero lo cierto es que, aunque el planeta estaba cercano a desaparecer, algo aceleró su destrucción, la grieta se volvió inestable y tanto mi madre, como mi padre y Alfor trataron de estabilizarla, algo oscuro salió de ella, y mi padre pidió a la flota que se preparase para evacuar el planeta, descubrí en la nave nodriza que mi madre había enviado todos los archivos de su investigación, y que temía que los alteanos tuviesen algo que ver con este fatal desenlace. Cuando traté de decírtelo, el dolor no te dejó escucharme, pero los indicios son ciertos, y si te he grabado este mensaje antes de desaparecer, ya que sé que vienen a por mí, es para avisarte de que tú también estás en peligro.

>>Sabotearon el laboratorio de mi madre, y una Entidad oscura tomó posesión de tu padre, Honerva creía que se debía al poder inherente de este, Alfor cambió, pero pudo contenerla dentro de él, no sin tener graves problemas en todo su cuerpo, al sabotear la contención, se volvió imposible luchar contra lo que salía de la grieta, que se alimentaba sin control de la Quintaesencia del planeta y terminó con su destrucción con nuestro padres en el.

>>Nos hicieron creer que todo esto había sido provocado por mi padre, ya que es sabido que los Galra son un pueblo conquistador, aunque llevásemos mucho tiempo planeando una paz duradera, unida con los demás planetas en una República. Los archivos de mi madre estuvieron apunto de desentrañar quienes estaban detrás de todo esto, pero los intentos de sabotaje venían directamente del castillo en Altea, y de cruceros desperdigados por el universo, que buscaban algo, aún por determinar. Así que, todo acabó como acabó incluso para nosotros.

>>Tuve la oportunidad de trabajar con tu padre, un ser maravilloso, y estuve apunto de decirle lo nuestro. Porque te amo, Allura, siempre te he amado, y separarme de ti de esta manera, es lo suficientemente doloroso como para que me deje una herida que no dejará de sangrar nunca. Llevo sin verte tantos deca-phoebes... - Se lamentó. Los ojos del Príncipe Galra en la pantalla, se vidriaron, sus sentimientos eran sinceros, y los ojos de ella también lo hicieron, las lágrimas comenzaron a resbalar por los ojos de la Emperatriz- Cuando lanzaste el ataque contra mi pueblo, no podía creerlo, grabé este mensaje cuando me colé en el castillo por los conductos de evacuación. Y no cuento con que creas lo que te digo, pero después de aquello, tras un largo tiempo huyendo de los alteanos, viendo como todo se volvía oscuro a mi alrededor, como más y más de los nuestros, que primero eran amigos, se convirtieron en esclavos del mismo pueblo al que he amado, porque también es mi pueblo, de todo esto surgió un movimiento rebelde, tu ya sabes quienes son. Contacté con las Armas de Gamara, les envié los archivos de investigación de mi madre, y contactó conmigo un científico llamado Slav. Es un poco difícil hablar con él- sonrío y sus ojos volvieron a clavarse en los suyos. Guardó silencio un instante.