Capitulo 1: Vacaciones

59 3 0
                                    

TERESA

-Teresa arriba!!! - Rosa me levanta y caigo sentada.

Al fin después de un largo año regresan las vacaciones.

No más tareas, no más exámenes, no más trabajos en grupo y sobre todo... Adiós a levantarse a las 5 de la mañana todos los días.

Hoy es el último día de clases, y como siempre Natalia, la chica más popular de la escuela y de dinero, hará una fiesta grande en su casa por la noche. Amo las fiestas, son mi actividad favorita. Especialmente si es solo de jóvenes. Tengo buenas notas y debo aprovechar eso para salir antes de que mis notas caigan al suelo y no pueda ni caminar a la esquina de la calle. Si, a ese nivel es mi papá cuando se trata de mi educación así que siempre tengo que tener puras A y 10 en todas mis tareas y actividades escolares. No recuerdo mucho mi infancia ya que después del accidente como me cuenta mi padre, perdí la memoria y solo en algunas ocaciones puedo recordar pequeños fragmentos que no hacen sentido pero que están ahí en el fondo de mi memoria.

Luego de haberme levantado super temprano decido irme por una ropa más linda de lo que normalmente uso para ir la cole, la verdad sí me gusta mucho verme presentable pero a las vez me da flojera. Siento que quiero hacer una excepción hoy porque hoy es el último día y estoy muy feliz por eso así que tengo suficientes energías para arreglarme un poco más.

Miro mi armario y me decido algo sencillo pero bonito. Falda corta, medias hasta el muslo, chaqueta y botas. Amo las Timberlands y sobre todo la ropa blanca, negra y gris. Voy al baño y dejo mi cabello caer en ondas por mi espalda. No suelo maquillarme para ir a la escuela pero esta vez me colocaré mascara de pestañas, highlight y brillo apenas notable en mis labios.

Tomo mi bolso escolar y voy a la cocina para coger el sandwich que Rosa siempre me hace antes de irse a trabajar mucho más temprano que yo y al terminar de comer salgo de la casa cerrando con llave. La escuela no está tan lejos ni tan cerca pero toma unos 20 minutos caminando si me concentro en caminar rápido y no perder mi tiempo pendiente a otras cosas.

Mi padre me matriculó ahí porque es cerca de mi casa y así sabe que estoy fuera de peligro. El es un policía que trabaja la mayoría del tiempo pero siempre que puede pasa el poco tiempo que tiene libre para estar conmigo, somos cercanos, no tanto pero hay bastante confianza entre nosotros.

Por el camino coloco una de mis canciones favoritas para cantar mientras camino, hace que no me aburra de tanto caminar. Llego una hora antes de que toque el timbre.

Salgo corriendo despacio para la biblioteca y encuentro a Zayla allí como siempre.

-Tere!!- se levanta de su asiento y corre hacia a mí atrayendo la mirada de algunos estudiantes y de la bibliotecaria la cual nos hace seña de hacer silencio - Te arreglaste más de lo normal...-

-Shhh, ya, no todos se tienen que enterar...- la arrastro hasta una silla de la mesa donde siempre nos sentamos y busco una para sentarme a su lado - Es el último día, no me juzgues.

-Ya ya pero estas súper linda! - nos miraban raro por estar susurrando pero los ignoramos y seguimos conversando de mi vestuario y de la fiesta hasta que suena al timbre y nos vamos a nuestros respectivos salones.

Zayla y yo somos mejores amigas desde que tengo memoria, creo que la conocí como en el cuarto grado si no me equivoco. Teníamos nueve años, se me acercó porque el grupo de las bonitas que siempre andaban con ella ya no querían pasarse juntas. Según ellas, Zayla era muy agresiva y poco femenina. Le dije que podía pasarla conmigo si quería, la verdad ni yo era bonita ni mucho menos sociable pero me daba un poco de pena y aunque Zay sí se veía intimidante acepté ser su amiga. Prácticamente somos hermanas ahora y déjenme decirles que efectivamente es bastante agresiva pero al mismo tiempo 10 veces más femenina que yo.

Diana Teresa [Actualizando ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora