Caminé al único vehículo que estaba a dos lugares del mío, no me sorprendió cuando vi que era un jaguar del año, era un hombre rico, no podía esperar menos. Amablemente abrió la puerta del copiloto, rodeo el auto y cuando cerró la puerta detrás de él su colonia me embargo.
-Pensaba en algo francés – me observó - ¿Está bien?- preguntó con el mismo tono de voz que siempre le había escuchado
-Mi gastronomía favorita- sonreí y me dispuse a colocarme el cinturón de seguridad
- Perfecto – murmuró y salimos del parking.
No demoramos en llegar y gracias a dios no hizo comentario alguno, estaba nerviosa de estar a solas con él. Nuestro trato siempre era profesional y no hablábamos de nosotros cuando llegaba a la joyería, ¿Qué se supone que iba a hacer con él en una cena? ¿Preguntarle si quería servicio de pulido? Comenzaba a sentirme tonta.
Cuando llegamos al restaurante la host nos recibió con efusividad, claro que él era frecuente.
-Bienvenu Monsieur Pocciareli et madame... - me sonrió más efusiva de lo que me hubiese gustado
-Lukasian- respondió por mí con un tono plano – Mi mesa por favor –
-Pero claro- tomó la carta y la seguimos a través de unas escaleras que evitaban el comedor completo. Nicolae cruzó nuestros brazos a modo que mi mano ahora descansara en su bícep. Era firme. Me dedicó una risa que no supe cómo interpretar.
Cuando subimos ella abrió la puerta doble para nosotros, con el mismo gesto efusivo retiró la silla para que me sentara, le agradecí y después de entregarnos la carta salió.
Lo más llamativo del pequeño privado era la ventana completa que tenía, nos daba vista del big ben y de una parte del palacio de Buckingham. Las paredes eran color crema acompañadas de una iluminación tenue; cuadros decoraban la sala, las columnas que se elevaban en las esquinas tenían influencia colonial y el piso de alfombra color marfil complementaba todo a la perfección. La habitación desprendía un aroma a cedro, era algo precioso.
El centro de la mesa de cristal de cuatro sillas era decorado con complementos como Vinagretas, sal, pimienta, otras especias que desconocía y una flor.
Nicolae que aún estaba de pie se encaminó a una cava pequeña debajo del cuadro de flores, aún espaldas a mí preguntó: -¿Syrah, savignon blanc o Wegüstraminer?
-Savignon blanc- No debía de tomar pero si iba a hacerlo prefería algo suave y afrutado –Debo decir que su perfil no encaja con vinos alemanes- añadí y después me arrepentí, tenía que medir mis comentarios.
Se giró a mí con una risa vaga, destapó el vino con gracia y lo vertió en las copas
-Y yo debo decir que no esperé que fueras una conocedora de distintas cepas- alzó su copa a mí –Por tu cumpleaños Eva-
-Gracias señor Pocciareli- asentí y bebí. Me observó hacerlo y con una sonrisa continuó
–Llámame Nicolae y tutéame- me deslumbró con esa sonrisa
-Claro, lo intentaré- sonreí
-Y dime – alzó sus cejas - ¿Cuánto hace que conoces a tu amigo...? Cole, me pareció que así le llamaste- me observó muy atento. Era guapísimo.
Me atragante: -Pues – carraspee ligeramente - desde hace diez años aproximadamente, lo conocí cuando estudiaba la secundaria- alise mi falda –Lo conocí en Wolverhampton ahí nací y crecí, a los dieciocho me mudé a Londres- Su mirada seguía fija en mí, me estaba analizando y asentía -¿Y tú? ¿Eres de Inglaterra?-
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Siempre Yo [18+] TERMINADA
Teen FictionCuando Nicolae, su cliente mas difícil, la invita a salir se enfrenta a un mar de emociones que no sabe controlar, el miedo a morir y la excitación la llevarán a hacer cosas que nunca había hecho, logrando meterse entre las sabanas del hombre más a...