№04

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Apenas me puse de pie mi cuerpo entero comenzó a temblar. El tiembre había sonado hace ya unos tres minutos, pero aún no me sentía listo.

Desde hace tres días no veo a HyunJin. Llegué a pensar que lo nuestro había terminado. Pero de repente llamó. Realmente me sentí felíz en el momento en que su voz sonó del otro lado de la línea. Un poco de esperanza en lo nuestro empezó a crecer. Pero ahora, viendo lo incómodo que se ha vuelto todo, no creo poder aguantar su compañía.

Aún con muchas dudas en mi cabeza, me dirigí a la puerta y luego de dos respiraciones profundas, abrí. Se veía malditamente bien, como siempre. Esperaba con una sonrisa, aúnque ésta parecía un poco apagada. Y apesar de sonar mal, me alegraba un poco no ser el único que lo haya pasado mal.

—Jeongin… —fue lo único que musitó cuando me aparte de la entrada para dejarlo pasar. Me alegro bastante el escuchar su voz, pero ésta era demasiada fría. No era como la recordaba.

Sonreí por inercia. Por el simple hecho de su presencia. No me había dado cuenta de lo mucho que lo extrañaba hasta ese momento.

—Hyunjin… —el tono de mi voz se volvió bastante alegre. Y cuando su sonrisa brilló, solté el aire que no sabía que había retenido.

El miró con detenimiento el resto de la habitación. Cómo si hubiese pasado bastante tiempo. O cómo si no fuera a volver nunca más y estuviera intentando recordar cada detalle.

Lo invité de manera nerviosa a que vayamos a la sala. Asintió y me siguió en silencio. Una vez sentados, el ambiente se volvió pesado. Jugué con mis dedos mientras buscaba algún tema de conversación.

Si sabes que no es necesario hacerlo de esa forma, ¿no?

La estúpida voz de Seungmin hacía eco en mi cabeza, junto con la incómoda conversación de esa noche.

—Te extrañé, ¿no me extrañaste tú…? —abrí mis ojos con sorpresa. Todo mi cuerpo se desesperaba por gritar qué sí, que muchas veces había tenido el impulso de llamarlo, de ir a buscarlo…

Pero Hyunjin no me dio tiempo de responder. Bajó la cabeza y cubrió mi boca con la suya. Mi cuerpo se tenso por el shock, pero cuando una de sus manos se posó en mi mejilla, me derreti contra él. Solté un vergonzoso gemido por sentir luego de tanto tiempo sus húmedos y gruesos labios. Él jadeo que soltó Hyunjin fue muy diferente al mío. Reconocía ese sonido. Hyunjin estaba excitado.

—Y-yo igual. Te extrañe… —respondí intentando que su atención vuelva a mi. Pero él estaba demasiado enfocado en si mismo. Me removí cuando sus manos se deslizaron a mis caderas. Apretando un tanto al tiempo que se inclinaba más a mi.

Tienes que entenderlo…

Nunca antes había sentido el cuerpo de Hyunjin tan caliente.

—HyunJin, te amo. —de repente, paró todo movimiento. Nuestras miradas se juntaron y pude observar un inusual brillo en ellos, junto con sus pupilas violentamente dilatadas. Aproveché su repentina conmoción y me levanté lentamente del sofá. Lo miré una vez más, pero sus ojos ya no estaban en mi. Me armé de valor y luego de un suspiro me dejé caer de rodillas frente a él.

Once meses…

—Te amo… —volví a repetir buscando una respuesta de su parte al tiempo que recorría sus fuertes muslos con mis manos. Antes de llegar a la entrepierna di un leve apretón para obtener una reacción de su parte. No hice ningún contacto con su bulto y salté directo a deshacerme de el molesto cinturón. Mis manos temblaban por mi nerviosismo y mi garganta se secaba al saber lo que estaba por hacer.

Él solo se dedicó a observar al tiempo que mordia su labio inferior. No parecía consciente de lo que estaba pasando pero el sonido de su cremallera siendo abierta lo puso alerta. Sus ojos se abrieron exageradamente y posó sus manos sobre las mías imponiéndome seguir.

—Innie, tú… —comenzó a balbucear mientras relamia sus labios nervioso. Me alejó por completo de su erección y volvió a subir la cremallera y colocar el cinturón. —Tu… tú no tienes… —tomó con sus temblorosas manos las mías y me levantó de el suelo con cuidado.

—Hyunjin, yo-

—Tu no tienes que hacer eso, Jeongin. No tienes que sentirte culpable por nada. No tienes que sentirte mal por mi. —habló rápido mientras se levantaba del sofá y se acercaba cuidadosamente a mi, aún con nuestras manos entrelazadas. —No quiero que intentes nada de eso otra vez. Sé que te sientes incómodo. No quiero que lo estes. Porqué si tú te sientes mal, yo también me siento mal. ¿De acuerdo?

Asenti de manera lenta sin despegar mis ojos de los suyos. Él me sonrió a la vez que me atraía a su cuerpo y nos dejaba caer a ambos sobre el sofá.

Estuvimos abrazados todo el tiempo. Aunque naturalmente no me gusta ese tipo de cercanía, no me alejé de él ni un sólo segundo. Ni siquiera me removí. Me había acostumbrado tanto qué en cuanto él se fue, todo mi cuerpo se deprimió. Y a pesar de que me había dejado perplejo el hecho de que no se quedara a dormir como siempre acostumbrada , no reclamé ni comenté nada al respecto.

Esa noche lo extrañé más que en las anteriores.

-🌱

No corregí éste capítulo. Perdón por las faltas de ortografía. Luego lo reviso mejor <3

Gracias por leer(? ♥️

Asexual ⇔ HyunInDonde viven las historias. Descúbrelo ahora