Asexual ⇔ HyunIn

№13

Estaban sentados en el suelo, dándose la espalda, pero apoyados en el otro.

Jisung estaba nervioso, sin entender porqué. De pronto se quedo sin palabras. Cualquier comentario gracioso, que en otro momento hubiera salido sin siquiera pensarlo, ahora era como si estuviera apagado.

HyunJin por su parte, estaba completamente en blanco.

—Lo estoy pasando fatal…

Pasó las manos sobre su rostro para rasgar todas las lágrimas que se acumulaban en las esquinas de sus ojos y caían deslizándose por su nariz hasta chocar en el piso.

—Lo sé. —la voz de Han salió en un suspiro, mientras asentía con la cabeza.

Él lo sabía. Por eso estaba ahí. Aún si MinHo y Changbin lo habían prácticamente amenazado con dejar de hablarle si llegaba a buscar al castaño; lo hizo. Porqué HyunJin estaba mal y él era su amigo.

—Creo que voy a romperme. —la embriagada voz de HyunJin le decía que estaba extremadamente triste.

Si él hubiera intervenido esa noche en aquél bar, ¿todo sería diferente?

Si no sintiera tanta presión social. Si hubiera mandado al diablo a MinHo, ¿su amigo no estaría así?

—Dejé que se acercara demasiado. —la voz se le quedó atascada en el medio de su garganta y se recostó por completo sobre la espalda de Jisung.

—Te acercaste demasiado. —corrigió con voz apagada.

—¿No crees que también fue su culpa?

El menor sonrió sin ganas y negó varias veces con la cabeza aún si el castaño no lo veía.

—No digas esas cosas. Te hace sonar como un tonto.

Hwang escondió la cabeza entre sus manos y sollozó.

—Eres un bebé llorón. —el rubio rebuscó en los bolsillos de sus pantalones hasta rozar un delgado plástico con sus dedos.

—Mira quién habla.

La presión en su pecho fue reemplazada por un sentimiento de ternura al ver a su amigo tenderle un pequeño caramelo.

—¿Cómo en los viejos tiempos? —dobló un poco su brazo hacia atrás para poder tomar el dulce.

—Todo estará bien.

El mayor se echó a reír con la misma ilusión de siempre y Han no pudo evitar reír también. Ni siquiera él podía creer en sus propias palabras.

Si hubiera un espacio vacío a tu lado, ¿me mirarías?

Jisung soltó un sollozo y el castaño maldijo enseguida. Se giró hacía él y observó la espalda del rubio temblar un poco.

¿Estaba llorando también?

Hwang sorbió su nariz de manera ruidosa, sacándole una risa verdadera a Jisung. Una que le mandó tranquilidad a todo su sistema.

Colocó una mano sobre su hombro lo hizo voltearse y sin pensarlo dos veces, con sus brazos largos lo atrajo hacia él, dejándole a centímetros de su rostro.

Sus ojos se colocaron sobre su boca.

—¿Lo amas?  —preguntó un indefenso y sonrojado Han.

La pregunta lo hizo volver a tierra.

—Demasiado. —no dudo ni un segundo en responder.

—¿Entonces porqué sigues aquí?

Reaccionó con una sonrisa y se inclinó un poco para besar la coronilla del menor.