Un cierto romanticismo.

11.- De regreso a la normalidad

Después del incidente con la asesina que secuestró a Spence, volvimos a la UAC y todos en el edificio hablaban sobre aquello.

Durante alrededor de dos semanas me la pasé escuchando 'Que la mexicana salvó de la extinción al bellísimo espécimen denominado como Spencer Reid' o que 'La mexicana nunca hubiera podido actuar sola, si no que llamó a alguna banda de cholos cercana para que la auxiliaran' Agh, Gracias, Kelly Anderson, del departamento de administración por decir aquella burrada.

// FLASHBACK//

—.Hey, Rutherford. —

Respiré hondo para mis adentros y traté de utilizar la técnica de calma absoluta en el momento en el que a mis oídos llegó aquella horrorosa y chillante voz

—.¿Qué se te ofrece, Kelly? —

—.Sólo quería agradecerte por salvar al bombón de Spencer, sin ti, este sitio nunca hubiera sido el mismo.—

Suspiré y en mi rostro se dibujó una sonrisa muy, muy forzada.

—.Ah, si no fue nada, yo...—

Fui interrumpida abruptamente por aquella chica que manoteó en el aire un poco.

—. ¿Todo el crédito te lo estás llevando tu sola? Ah, vaya chica, engreída...—

Aquello lo dijo en un tono de voz algo inaudible, pero para su mala suerte en mi departamento nos enseñaron a desarrollar un oído impecable. Arqueé una ceja haciéndole entender que había escuchado su palabrería y la sonrisa que la chica de pelo teñido en rubio tenía dibujada en la cara cambió a una mueca de espanto.

—. ¿Acaso no te ayudaron los cholos de la cuadra donde tenían a Spencer? Digo, llegar de la nada a un lugar donde tienen a alguien secuestrado uno solo... y tú como mexicana deberías tener algún código secreto con esas personas, supongo. —

Estaba atónita, escuchándola muy, realmente muy atentamente por que no podía creer lo que estaba saliendo de su boca.

—. ¿Cholos? Kelly, deberías dejar de ver Narcos en Netflix, y también todas esas películas donde salen todos esos míticos personajes. —

Me crucé de brazos y mantenía mi semblante de antes: Una sonrisa algo forzada y una postura imponente, a pesar de mi poca estatura, al parecer a todo el departamento de administración le aterraba el siquiera escuchar mi nombre o el apodo por el que Morgan me llama.

—. No es eso... bueno si veo Narcos en Netflix pero eso no tiene nada que ver con mis creencias en los cholos. —

—. Kelly, no tengo tiempo para tus estereotipos, te agradezco que te hayas tomado la molestia de venir a decirme todo esto pero, sería más feliz si me dejaras ir a mi oficina, hoy es día de donas y Rossi siempre compra las mejores, adiós rubia falsa. —

Lo último lo dije en español, mi plan era mantenerla confundida y salió todo a la perfección, Kelly se quedó parada cercad de la puerta de entrada del edificio donde me había abordado para esa absurda conversación.

//DE REGRESO AL PRESENTE//

Caminaba de forma habitual por el pasillo hasta donde se hacían los análisis de los casos, de la nada sentí que una mano me agarraba del brazo y de un tirón me aventaba dentro un cubículo, me reincorporé lo más rápido posible de aquella sacudida y miré confundida a mi alrededor.

Dentro de aquel extraño cubículo se encontraban Reid, Rossi y Morgan como si de una interrogación se tratase.

—. Asi que Kelly, la de administración anda diciendo que unos cholos te ayudaron a rescatar a Reid...—

Morgan soltó la primera frase de manera casi automática

—. No había ninguna banda de cholos por ahí cerca y, de todas maneras, administración no tiene por que meter sus narices dentro de los casos que resolvemos. —

Rossi, cruzado de brazos y caminando por toda la habitación, comentó para acompletar el punto de su compañero.

—.Eso es absurdo... fueron ustedes, además, los cholos a veces son traicioneros. —

Me sentí abrumada y totalmente confundida ¿Qué demonios está pasando con estos tres y como porqué las mentiras de la rubia teñida tenían tanto impacto

—.Eh, si, buenos días, primero que nada. —

Me acerqué a uno de los pequeños sillones que se encontraban cerca de donde yo me había parado y tomé asiento.

—. Porque sinceramente no entiendo i un carajo. —

Crucé mis piernas en espera de alguna respuesta y Morgan rió

—Nena... Los de administración son bazofia, no les prestes atención, El jefe de aquel departamento vino con Hotch hace como 2 días a reclamarle que tu, y específicamente tu habías comentado algo de 'rubia falsa' a Kelly. —

Trató de decir 'rubia falsa' de la misma manera déspota en la que yo le había contestado a ese personaje.

—.Oh vamos, ¿De verdad se ofendió por algo que no pudo entender nunca acaso? No, pues que sensible. —

Reí y negué con la cabeza, Reid colocó una mano suya encima de la pierna que había dejado cerca de su espacio personal

—. De cualquier manera, Hotch nos comentó que teníamos que decirte esto de que 'Según no debes hacerles caras a tus compañeros' por que según el señor 'Se pierde el compañerismo'. —

Todos soltamos una carcajada, todos en el edificio saben que los únicos que pueden trabajar bien, somos nosotros, ya que nos sentimos realmente parte de una familia, eso es lo que los demás departamentos envidian de esta pequeña comunidad de gente enfocada a resolver los casos más difíciles en todo Estados Unidos: solamente un departamento en todo el edificio puede convivir en paz y realizar lo que los demás no.

En menos tiempo y con menor agotamiento.

Nos sacaron al poco rato del cubículo aquel y justo cuando íbamos a salir a comer a nuestro restaurante favorito de todo el mundo que está cerca de el centro,una llamada de Penélope nos cambió los planes de manera en la que nos lo esperaríamos siempre cuando surge algo nuevo...

Y eso, es parte del oficio.