Be My Light [BNHA] [Shinsou Hitoshi x Lectora]

Epílogo

Un mes después

Sus ojos violáceos cayeron sobre las hojas entre sus manos, cada una firmada y sellada por los directivos del centro de híbridos. Es un día soleado, caluroso. Pero para Shinsou, es perfecto, tal vez nunca se sintió de tan buen humor en su vida. A medida que caminaba por la calle, algo brillante resalto en su cuello; la placa con su nombre. Tardo el tiempo correspondiente para conseguirla, y hoy se podía considerar a sí mismo "libre"

Paso una de sus manos sobre el cabello enmarañado de siempre, sintiendo el peso de las llaves del departamento de (T/n) en el bolsillo de su chaqueta de jean.

«Me pregunto si estará dibujando ahora» Una sonrisa creció en sus labios, dándose cuenta que apuro el paso. El edificio quedaba a unas diez cuadras del centro de híbridos donde estuvo yendo durante el mes, algo así como una escuela donde debía hacer diferentes exámenes y revisiones médicas para certificar que era un híbrido en buen estado, tanto físico como mental.

Fue difícil al principio, estar encerrado en un lugar –otra vez- con más híbridos no le hacia ninguna gracia.

Sin embargo, aquí esta, último día con todos los permisos necesarios para poder vivir en paz.

Guardo los papeles apenas vio a lo lejos el edificio, buscando rápidamente las llaves. El encargado le dirigió un saludo amistoso, al igual que otros vecinos más. Shinsou era bien conocido por ser el "rescatista de gatos" y "el ayudante de las abuelitas". Era ese vecino amable que todos adoraban.

Al esperar por el ascensor, una mano palpo su espalda.

―¡Hey Shin! ―Denki esbozo una sonrisa, cargando en la mano libre varias bolsas de supermercado―. ¿Volviendo del centro de híbridos?

Denki Kaminari es un híbrido de Golden Retriever, energético y fiestero. Cada fin de semana hacia reuniones con sus compañeros, a veces eran tranquilas y en otras, Shinsou debía ir a golpear la puerta porque el ruido era bastante alto. Aunque ya no lo hacía tan seguido, la última vez que fue, Denki lo arrastro a su fiesta. Dejando de lado su comportamiento escandaloso, el rubio es amigable y de los pocos híbridos que viven en el edificio. De cierta forma, saber que hay otra persona como el, le daba alivio.

―Último día ―Dijo, entrando al ascensor con el híbrido canino colgado a sus hombros―. Hace calor, ¿puedes quitarte?

―¡Felicidades, bro! ―Grito alegre, y alzo las cejas, ignorando la petición del felino―. ¿Vas a hacer una fiesta? Si quieres podemos hacerla en mi casa, ya sabes, algo a lo grande.

Shinsou ya quería llegar a su piso, pero estaba de muy buen humor como para ser cortante con el energético Retriever.

―Gracias, pero no ―Al ver su sonrisa flaquear, agrego; ―. Saldré con (T/n), una reunión de amigos. ¿Quieres venir?

La larga cola rubia del canino se agito repetidas veces, golpeando contra la pared del ascensor. Las puertas metálicas se abrieron al llegar al piso correspondiente, y Shinsou se alejó del músico no sin antes esperar su respuesta.

―Si no soy molestia, ¡cuenta conmigo!

Hitoshi asintió con una leve sonrisa, despidiéndose de su amigo. El manojo de llaves y llaveros entre sus manos sonaron con cada paso que daba en dirección al departamento, el largo pasillo blanco que antes le causaba ansiedad, ahora se le hace familiar y reconfortante. Porque está a tan solo unos segundos de ingresar a la seguridad de su hogar.