El amor y la muerte dominan esta historia.
¿Que darías por traer a la vida a tu amada?
No serias él primero en dar tu alma por la suya...
Pero seras él primero en destruir tu propia alma.
Seras él primero en convertir tu alma destruida en algo que...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-¿Hace cuanto tiempo dije eso...?
Veo él amanecer acercándose y Mary solo esta ahí de pie con la mirada baja. Es tan silencioso que escucho el mar a la perfección...-
Matt simplemente se acercó a la chica. Ella bajo su mirada al ver como él se le acercaba. Ella en él interior gritaba desesperadamente por él chico, y al saber lo que este había hecho por ella la llenaba con una mezcla de ira y dulzura.
Ahí estaba él, frente a ella con su mano derecha tocando suavemente su mejilla. Mary solo se preguntaba "¿Cuando comenzó toda esta locura?"-
En otro tiempo, una pequeña niña jugaba en un pequeño patio lleno de tierra. O eso es lo que diría su madre observándole mientras la pequeña reunía piedritas y ramas del lugar. Reunía todas las que podía y las amontonaba en él centro del lugar.
Ahí todo era silencioso, no había brisa mas gentil que no fuese escuchada. Pero algo era distinto ese día, no muy lejos unos golpes se escuchaban, a pesar de no ser ruidosos eran bastante notorios y un poco irritantes.
-¿Que es ese ruido?- Un chico mayor salio al patio en busca del origen de la molestia, pero por mala suerte no lo encontró en él patio.
Por su parte, la pequeña no le molestaba en absoluto aquel ruido. Pero él hecho de que su hermano saliese al patio la hizo interesarse en él ruido.
-Voy a investigar...- dijo él chico alejándose del lugar pero se detuvo al escuchar algo.
-¡También quiero ir!- grito la pequeña tomando la mano de su hermano.
Ante tal acción él chico solo miro a su madre la cual le dio su aprobación con la mirada.
-Esta bien, solo no me sueltes Mary.-
Ya habían pasado varios minutos caminando. En cualquier otro lugar él ruido no seria algo notorio, pero en un lugar donde es siempre silencioso llega a ser preocupante.
-¿Cuanto falta?- preguntaba la pequeña como si su hermano lo supiese.
-Falta poco.-
Y efectivamente, sin darse cuenta ya estaban de donde se originaba él sonido. El chico soltó a la pequeña y miro en los alrededores pero no veía nada.
-¿Es una broma?- preguntaba un tanto serio.
-¡Hermanote!-
Aquel grito le hizo darse cuenta que Mary ya no estaba a su lado y ahora él lo llamaba a todo pulmón. -¡Mary!- grito él chico mientras corría en busca de su hermana.
Ella se encontraba cerca, él lo sentía... Cada vez él ruido era mas intenso y rítmico como los latidos de un corazón.
Ahí estaba la pequeña, de rodillas dando golpes a un pequeño niño inconsciente con manchas de sangre en su ropa.
