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Todo empezó de manera natural, nos conocimos y nos hicimos amigos, nos fuimos volviendo cercanos hasta el punto donde caí enamorada de ti, intenté confesarme, intenté expresarte mis sentimientos, pero ese mismo día caí enferma.

Esa mañana de marzo un terrible dolor en la garganta y ganas de vomitar me obligaron a correr hacia el baño donde acabé vomitando algo extraño, algo inhumano, era imposible que mi organismo pudiera crear semejante belleza.

Pétalos rojos caían de mi boca directos al suelo, no llegué a tiempo, pero si llegué a sentir el dolor creado por esas pequeñas hojas, hojas intensas que enamoraban a simple viste.

Observé el suelo preocupada, ¿cómo iba a decirle esto a mi madre? ¿cómo iba a superarlo?

"Mamá, tu hija está sintiendo las consecuencias de un amor no correspondido, ¿cuánto me queda de vida?" preguntas que quedaban en el aire sin respuesta, ella ya no estaba aquí, no tenía sentido buscar la solución.

"¿Por qué no has venido a clase? ¿Estás enferma?"

Tu mensaje me dejó extrañada, qué te iba a responder, ¿que tu amor me estaba causando este dolor? ¿qué todo era tu culpa?

No lo sé.

Hanahaki Disease ( Mark Tuan )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora