𝐚𝐦𝐢𝐠𝐨 𝐝𝐚𝐭𝐞 𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚 ʚ minv

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—Ah, supongo que, no tendré oportunidad con él—dijo el peligris un poco mareado—. ¿Sabes? Él es tan... Tan perfecto... Y lindo...

—Oh, por favor—su amigo rodó los ojos—, eso ya lo sabía—sonrió con sorna.

—¿Tienes algún...?—hipó—. ¿Problema...?

—Te terminarás desmayando aquí—advirtió, viendo cómo el menor se ponía en su posición de "pelea"—. Vámonos.

—No me digas que hacer.

—¿Otra vez con eso?—bufó un poco fastidiado, para tomar al peligris por los hombros y salir del bar.

—Déjame ser, YoonGi...

❀❀❀

—¡DING DONG!

Casi estaba que pateaba la puerta para entrar. Llevaba esperando alrededor de quince minutos y nadie habría, cosa que lo impacientaba.

Había llamado a su amigo más de cinco veces, y este no contestaba ninguna de sus llamadas, ni siquiera los mensajes de texto.

Un poco desesperado pero al mismo tiempo preocupado, se rindió y tomó camino hacia su casa.

Pero...

—¡Oh! ¿P-Por qué eres un fan...fantasma?

El rubio distinguió la inestable voz de su amigo, y cuando volteó, se dio cuenta de que ahí estaba, sentado en el césped y con una expresión horrorizada.

—¡Aléjate!—gritó JiMin, para después intentar ponerse de pie.

—JiMin... Soy yo, YoonGi—murmuró, acercándose al otro.

—W-When the... soandja tlahgee..

—¿Qué?

—And y-yu har bscaed...

—¿Estás invocando al demonio, o qué te pasa?

—Whooo you g-gonna call?—se detuvo, para después girar su cabeza en donde estaba YoonGi—. ¡GhossstbUSTER!

Qué.

—Y-YoonGi hyung, yo l-lo puedo cuidar...—el pelinegro se dio la vuelta, encontrándose con un TaeHyung apenado.

—Uh, está bien...—se quedó pensando un momento en todo lo que le había contado JiMin, y sonrió travieso—. ¡Todo tuyo TaeTae!

El rubio solo vio como el mayor se iba a toda velocidad en un coche negro mate.

¿Por qué fue tan fácil "convencerlo"?

—Vaya...

—¿Y t-tú qué haces aquí pancita de b-bebé...?

TaeHyung simplemente suspiró sin responder. Sería un poco complicado meterlo a casa sin que se caiga.

JiMin lo miraba con una ceja alzada, como si estuviera juzgando cada una de sus acciones.

Y es que así era.

—Te... Te c-cargaría como... la princesa que... e-eres—comentó el peligris—, ¡pero ambos nos caeríamos!—finalizó, dejándose ayudar por TaeHyung.