Cap.6

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-Cia...-notaba como alguien me acariciaba la cabeza provocándome mi primera sonrisa del día. Rosa. Sonrisa que no duró mucho -tu padre está abajo.
Me levanté dedicándole una falsa sonrisa para que no se preocupara y me levanté desganada poniendo mi melena despeinada tras mis orejas para bajar a junto de mi padre. 
-felicidades hija-no podía seguir enfadada con él, era mi padre y se le veía cansado, como si no hubiera dormido en toda la noche.
-gracias papá-me acerqué a él y lo abracé aún dormida.
-Por qué no te vistes y vamos a casa? te tengo una sorpresa-yo le sonreí con desgana y subí las escaleras para entrar en la habitación de Alanis donde ella aún dormía, al oírme entrar abrió levemente los ojos y se recostó en la cama. 
-Cía?
-es mi padre Alanis sigue durmiendo tranquila-me acerqué a ella después de que se volviera a acostar y le besé la frente para acabar de vestirme y salir de allí cerrando la puerta cuidadosamente.
-Cia?-Alex estaba en la puerta de su habitación con el pantalón de pijama y la misma sudadera de ayer pero con el pelo todo despeinado que le tapaba esos ojos claros que tenía que recién levantado eran más claros todavía.
-mi padre vino a buscarme-me puse el mechón de pelo que me colgaba delante de mi cara tras mi oreja y el sonrió.
-y tu estas mejor?
-si, la verdad es que si, y tus heridas que tal están ?
-muy bien gracias a ti enfermera-no pude evitar ponerme colorada y escondí mi cara bajándola mirando hacia el suelo, pero el se acercó a mi, me agarró el mentón y me puso mirando hacia él. 
-me alegro de que estés bien, a ver cuando te vuelvo a ver eh ?
Después de dedicarle una sonrisa bajé las escaleras y me encontré a Rosa hablando con mi padre en el pasillo esperando a que yo bajara, al verme, ambos me dedicaron una sonrisa y Rosa se acercó a mi
-bueno cariño, vuelve cuando quieras eh-me cogió y me dió un fuerte abrazo
-muchísimas gracias Rosa y siento muchísimo las molestias. 
-no seas tonta hija mía, no es ninguna molestia tenerte aquí con nosotros ya sabes que eres bienvenida aquí siempre que quieras-le dediqué una sonrisa y tras darle otro corto abrazo salí por la puerta con mi padre. Entramos en el coche y tras abrocharme el cinturón ya empezó la charla que más me temía.
-tu madre...estaba enganchada a las drogas hija...-lo miré bastante sorprendida-se fue porque yo no dejaba de presionarla.
-no es culpa tuya papá, se fue ella solita porque ella quiso
-se está muriendo Cia ...-aquello no se por qué hizo que me diera un vuelco al corazón-se arrepiente de lo que hizo, se fue en busca de ayuda, ya está reformada.
-y se muere?-no sabía por qué pero empezaron a caer lágrimas de mis ojos, mi padre al verme apartó el coche a un lado de la carretera y se giró para verme. 
-eii-acercó su mano para secarme las lágrimas con el pulgar-no pienses en eso vale? es tu cumpleaños y te tengo un regalazo chachi piruli-que mi padre hablara así siempre me hacía muchísima gracia y no lo podía evitar. 
Al llegar a casa subí directa a mi habitación para poder cambiarme de ropa y vi un pequeño sobre encima de mi cama con un lacito pegado, lo abrí y dentro me encontré tres billetes de avión con destino a
-felicidades cariño-volví a mirar al sobre.
-Italia?
-son para ti, Alanis y Alex-cuando dijo el nombre de Alex el corazón empezó a latirme más rápido. -son para dentro de dos semanas ya hablé con Rosa para que se lo dijera a sus hijos-me giré y fui junto a mi padre para darle un gran abrazo.
-muchísimas gracias papá- mi padre salió de la habitación tras dedicarme una dulce sonrisa y mi teléfono empezó a sonar.
-Italia allá vamos!!! mañana vamos de compras y no acepto un no por respuesta. De fondo escuchaba la voz de Alex.
-lo siento no pude pararla-eso hizo que soltara una pequeña carcajada.
Cuando quise darme cuenta allí estábamos Alanis y yo en la puerta de la universidad y Alex estaba de frente en el coche de Rosa esperándonos para irnos de compras, paseamos por todas las tiendas y el pobre de Alex cargaba con las bolsas de su hermana mientras ella saltaba y corría por todo el centro comercial, yo me compré un par de camisetas y un vaquero bastante ajustado y Alex dos camisetas mientras que Alanis se llevó medio centro comercial.
-vamos Cia cómpratelo!!- yo me miraba una y otra vez al espejo mirando aquel top azul que me había cogido Alanis para que me lo probara.
-no se yo...
-llevatelo, te resalta los ojos-miré hacia atrás con el espejo y vi a un Alex sonriente, pero fijándome bien vi a la dependienta babeando y hablando de Alex con otra chica que trabajaba con ella, al ver para donde se dirigía mi mirada Alanis se giró para mirarlas sin ningún tipo de vergüenza y ellas la miraron tragando fuerte.
-se os perdió algo en mi hermano? no verdad? pues recoged las bragas que se os han caído y volver al trabajo, ellas pusieron una expresión de indiferencia y se fueron a la zona de la caja.
Alex no pudo evitar reírse y yo mientras me quité el top para ir hacia la caja a pagar. Me lo llevo.
Entramos en el coche con los batidos recién comprados y nos fuimos a casa de Alanis para dejarla ya que tenía que ir a hacer unos recados con Rosa y Alex me llevó de vuelta a mi casa. 
-en realidad...podrías llevarme a esta dirección? -el miró para mi móvil y afirmó con la cabeza mientras hacía un giro brusco de volante. 
-quedaste con alguien?
-si-le dediqué una sonrisa antes de decirle con quien-con mi madre.

EL HERMANO DE MI AMIGADonde viven las historias. Descúbrelo ahora