Spideychelle/ Un amor entre telarañas

PARTE 8

Michelle:
La noche esta siendo realmente de mi agrado, si bien no me caracterizo por ser una persona muy demostrativa, todo esta marchando mejor de lo que esperaba.
Todavía se me hace difícil creer que Peter este siendo tan lindo conmigo, ni en mis sueños hubiese imaginado estar charlando tan cómodamente con él. Esto es genial.

Peter se ofreció por ir a buscar algo de beber, pero siendo sincera no me imagine que tardaría tanto. Ya ha pasado un buen tiempo desde que se fue y no da señales de volver. De seguro solo esta ayudando a Ned con algo de la fiesta, y por eso esta demorado.

Espero unos minutos más afuera, pero al ver que no aparece decido ingresar a buscarlo, tal vez necesite ayuda con algo, no lo sé.
Mi vista viaja a través de muchas personas pero no logro ubicarlo, luego mis ojos captan a Ned charlando con una chica, y sonrío al verlo tan animado. Pero mi sonrisa se borra casi al instante al mover mi vista hacia el costado.

Peter esta allí, riendo tan alegre con una chica. Lo mas llamativo es que ambos sostienen un vaso en sus manos, y parecen estar así hace ya un tiempo, el tiempo que yo lo he estado esperando afuera.
Mis ojos arden, me siento una completa tonta por esperarlo como una boba todo este tiempo. Después de todo, esto ya estaba siendo demasiado lindo para ser real.

Mis ojos quieren llorar pero no me lo permito, se supone que esto no debe afectarme, se supone que no me interesa Peter Parker, se supone que solo soy la fría Michelle. Pero solo se supone, porque la realidad es completamente diferente.
Mi celular vibra haciendo que deje de verlos, lo busco en el pequeño bolso que mi madre me compró para combinar con mi zapatos, vaya ¿quien podría llamarme?, lo tomo en mis manos y observo.

Llamada entrante: papá

-Hola papá - hablo un poco extrañada, es realmente algo muy raro que él este llamando.

-¡¿Donde estas?!- pregunta con su típico tono malhumorado- ¡Dime que no has ido a esa fiesta de la que hablaba tu madre!.

-Yo...- intento hablar pero me interrumpe.

-¡¿Que es esa música?! Quiero que vuelvas ahora Michelle - exige.

Miro con tristeza a Peter y la rubia que lo acompaña una vez más. Maldición. No sirve de nada que siga aquí.

-Estoy en camino papá - respondo mientras me dirijo a la salida- llegaré en un momento.

-¡Date prisa! - dice y cuelga.

Tomo el primer taxi que encuentro afuera y regreso a casa. Mi mente me reprocha no haber confiado en mi instinto a la hora de ir a esa fiesta. ¿En que rayos estaba pensando? Jamas debí haber asistido.
Bajo del coche después de pagarlo y entro a casa. Papá esta en la sala viendo televisión y de mamá no hay rastro.

-Hasta que por fin decides aparecer - dice mi padre, mientras me deshago del bolso.

-Vine lo mas rápido que pude - contesto normal. No quiero discutir, no me siento en condiciones de hacerlo.

-No debiste haber ido- niega con su cabeza- ni siquiera sé porque le sigues el juego a tu madre.

-Bueno ya estoy aquí ¿no?- respondo- ¿Que necesitas?.

-Vete a ti misma Michelle - habla ignorando lo que he dicho- Esa no eres tú - me mira con rechazo- Y no sirve que intentes serlo.

Auch. Eso dolió mas de lo que esperaba. Trago grueso e intento demostrarle que sus palabras no me afectan.

-Si no necesitas nada preferiría subir a mi recamara - lo ignoro, es la única forma que encuentro ahora para no derrumbarme.

-Tu madre siempre metiéndose donde no la llaman- vuelve a ignorarme - de nada sirvió que ella te vistiera así, si volviste temprano.