Like, La leyenda |Multiship|

|Kevmilia|Te quiero para mi - P2

-Emilia.- dijo el chico con un nudo formándose en su garganta.

Ella se alejó rápidamente del argentino.
-Kevin.- musitó - Te... te juro que no es lo que parece.- habló nerviosismo.

- No te preocupes.- dijo frío - los dejo sólos. No era mi intención interrumpir.-  salió de ahí de prisa.

- ¡Kevin!.- gritó Emilia.- espérame, déjame explicarte.

- ¿Emilia por qué le tenes que dar explicaciones a ese pibe?.- preguntó Claudio con un tono serio.

- Por que es mi amigo y no quiero que piense que... que pues... hay algo entre tu y yo.

- ¿Y qué si lo piensa? ¿acaso te gusta?

- A ver, Claudio.- se dirigió a él con firmeza en sus palabras.- yo te quiero muchísimo. Y tal como te dije hace un momento yo nunca te voy a dejar sólo y voy a estar para apoyarte siempre... como amiga, porque eso somos. Tú tienes novia y es Antonia, eso lo tengo bien claro.- agachó la cabeza - No que tú no me hayas recordado a cada rato que estás enamorado de ella. - soltó- así que por favor entiende que así como tú tienes tu relación con ella yo también tengo derecho a tener una con quien a mi se me de la gana.

Claudio solamente la miraba atónito.

- Lo siento, no quería ofender.- dijo en un tono bajo.

- No te preocupes, ahora si quieres vamos a que te quites esa ropa mojada y descanses.

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Emilia acompañó a Claudio a su habitación y una vez que se aseguro que él estaba bien, fue a buscar a cierto chico al que le quería aclarar un par de cosas.

- ¿Se puede?.- dijo tocando la puerta de la habitación que estaba entreabierta.

- ¿qué quieres?.- contestó fríamente.

- Kevin.- pronunció mientras entraba.- a ver no te puedes poner así, simplemente lo estaba ayudando y...

Se detuvo al momento en el que vio que estaba llorando, o al menos eso parecía, tenía los ojos rojos y sus manos no dejaban de temblar.

- Kevin ¿qué pasa qué tienes?. - se acercó a él se sentó a su lado en la cama. Con su mano tomó el rostro del chico para hacerlo voltear.

- Vete, quiero estar solo.- dijo con la cabeza baja.

- No me voy a ir hasta que me digas qué tienes.

- ¡Necesito estar sólo! ¿qué no lo entiendes?- gritó mientras se ponía de pie.

- ¿Qué te pasa? ¿Por qué te pones así? - para este momento, Emilia estaba nerviosa. Jamás había visto a Kevin tan enojado. Su rostro estaba rojo y su vena saltaba del coraje. Ella simplemente no daba crédito.

- ¿Qué pasa?- la miró para luego darle la espalda.- ¡¿Qué qué pasa?!.- gritó. - Pasa que estoy harto de que él consigue todo lo que quiere... la vida perfecta, la escuela perfecta, la novia perfecta, la familia perfecta.
En un acto de odio y coraje, tiró todo lo que estaba en la mesa de noche.

- ¿de.. de qué ha-hablas?.- preguntó ella con nerviosismo. Sin embargo Kevin estaba tan furico que no la escuchó.

-El imbécil ese siempre se queda con todo lo que quiero! .- continuaba gritando- no le basta con tener a Antonia también necesita tenerte a ti a sus pies y encima mi padre siempre lo prefiere a él.- soltó.

- ¿qué?... ¿qué dijiste?.- Emilia se acerca a él quien seguía diciendo cosas por lo bajo. Tomó el rostro de Kevin en sus mano y le dijo: - a ver Kevin, mirame. Mirame bien- toma la mano de él y la coloca en la mejilla de ella - ¿ves? Yo estoy aquí ¿ok? No me ido a ningún lado ni me iré. Pero necesito que te calmes, ¿está bien?

Él sólo la miró y asintió. Ella lo llevó hasta el sofá que está en medio de la habitación.

- Emi.- susurró.- perdón yo... Te lo juro que no aguanto, jamás quise que me viera nadie así. En especial tú, pero no me pude contener. Todo es demasiado y ya no quiero seguir ocultando nada.

- Kevin, tranquilo.- tomó sus manos en las de ella- respira, sólo respira ¿ok?- pausó por un momento y lo miró- necesito que me digas qué fue todo lo que acabas de decir, de otro modo no te podré entender y mucho menos ayudar.

- Es que nadie me puede ayudar Emi, he hecho cosas muy malas de las que en realidad no estoy nada orgulloso y si te lo digo todo, te voy a poder. Yo... - más lágrimas salían por sus mejillas- no te quiero perder.

- Y no lo harás, te lo prometo que no lo harás.

- No prometas cosas que no sabes si podrás cumplir.

- Por favor, sólo dime.

Y así fue, él le contó todo lo que en verdad sucedía. Desde quien es él en realidad. Quiénes son sus papás y más importante quien es su papá. Y qué fue exactamente lo que llegó a hacer a LIKE.

- ¿O sea, que todo este tiempo has estado ocultando la verdad?.- Kevin sólo asintió con la cabeza.- ¿Cómo pudiste? ¿Tienes idea de cómo afecta a Claudio?

- ¡Claro! Claudio, porque eso es todo lo que a ti te importa.

- ¡Eso no es cierto!- refutó la peliazul- Y tú muy bien lo sabes.

- ¿Y cómo saberlo? Si siempre estás sólo al pendiente de él a los demás, que nos joda.

- Kevin eso es una total mentira. Yo te he demostrado que me importas. Si no fuese así, no habría venido hoy a pedirte una disculpa y explicar exactamente que fue eso que viste en las regaderas.

- Como si de verdad quisieras darme explicaciones. Además, tú y yo ni siquiera somos nada.

- Somos amigos ¿que no? Y las explicaciones te las doy porque yo quiero dartelas... Por que no quiero que pienses cosas que no son respecto a Claudio y a mí.

- ¿Por qué?.- se acercó a ella.

- ¿Por qué qué? - el tono de voz de ambos era ya mucho más calmado.

- ¿Por quéte importa lo que piense? - la retó.

- ¿Qué no te das cuenta? .- el negó ligeramente con la cabeza.- Tú me gustas, idiota. Desde hace tiempo y no había podido decirte porq...

No pudo hablar más. Sintió como unos labios se estamparon a los suyos en un beso que al principio fue desesperado pero que luego se tornó lento y dulce.

Ambos de separaron por falta de aire y juntaron sus frentes.

- Tú me encantas a mi Emi. Desde el momento que te vi me gustaste y cuando llegué a conocerte me di cuenta que eres hermosa por fuera pero aún más por dentro. Tienes una sonrisa que me ilumina a diario, en serio ahora que estás en mi vida no tengo idea de qué haré sin ti...

Tomó cierta distancia de ella.

- Pero sé bien que te he ocultado cosas, que te mentí a ti y a todos en LIKE. Así que entenderé si no me quieres volver a hablar o ver en tu vi...

Ahora fue él quien fue interrumpido por un beso. Uno corto.
- Te prometo que sigo y seguiré aquí. - tomó las manos del chico- yo te voy a ayudar a salir de esta mentira y que todo salga bien ¿ok? Yo voy a estar ahí, tomando tu mano, apoyándote cuando estés listo para decir todo.

- Eres increíble. En serio.- le dio un beso rápido y corto.- jamás tendré como agradecerte.

- Shhh.- puso su dedo sobre los labios de Kevin.- eso no es necesario. Sólo quiero que digas la verdad, que se acabe todo este asunto y yo estaré ahí contigo, siempre.

- Te quiero.

- Te quiero.