Mil maneras de amarte.

Capítulo 3

A lo lejos escuché el timbre de la casa, me desperté con dolor de cabeza, me incorporé y salí del cuarto, bajé las escaleras para abrir.

-¿Jimin?

-Hola Nai ¿cómo estás?

-Dime que estás solo.

-... Creo que sí. Disculpa olvidé que vendrías. La verdad no esperaba visitas.

-Jimin es lunes, no fuiste a trabajar, por eso vine a ver cómo estabas, no contestas tu teléfono.

-¿¡Es lunes!?

-Tranquilo. Ven. Cálmate, siéntate.

Nai trabaja conmigo en la escuela, es un buen amigo, me llevó hasta la cocina, puso la tetera lista y fue al baño, sacó un pequeño botiquín que teníamos, lo acercó a la isla de la cocina donde yo estaba sentado en uno de los bancos, se acercó y le puso alcohol a una bolita de algodón y me la puso, di un respingo y un pequeño grito al sentir entrar el alcohol en mi ceja.

-Cierra los ojos.

-Duele

-Lo sé.

No abro los ojos, en verdad me arde y duele la ceja, siento que se separa un poco de mí, pero antes de que pueda abrir los ojos, doy un nuevo respingo y grito al sentir el algodón, pero esta vez cerca de mi labio. Me entra una pena impresionante al darme cuenta de que Nai está curando las heridas que Yoongi ha provocado el día de ayer, me ha noqueado por completo el muy cabrón y lo peor es que me ha dejado así hasta el día siguiente.

Tomo a Nai de las manos y lo miro fijo a los ojos.

-Ni se te ocurra decirme nada, yo ni siquiera estoy aquí, es más antes de llegar, te has reportado conmigo y no llegué a tu casa.

-.... Gracias Nai.

-Voy a presentarte a alguien. Se llama Tae es un maestro de defensa personal, es muy bueno en lo que hace, tiene su propia escuela y te va a ayudar. No quiero decir con esto, que ya vas a matar a alguien, pero al menos podrás defenderte un poco más. Te juro que te ayudará.

-Gracias.

Nai se va pasada una hora, hemos coordinado algunas cosas laborales, me ha dado el teléfono del maestro de defensa personal, aunque dice que me lo presentará, pero que si por alguna razón lo necesito antes... es frustrante esta situación, pero de igual manera sé que por el momento no puedo hacer nada.

Regreso a la recámara y saco todo lo necesario para ducharme, me tomo mi tiempo ya que, por la hora, no iré a trabajar, así que ya no hay prisas. Termino de bañarme y me decido a salir y a hacer unas compras para la escuela.

Cinco horas después regreso, he comprado lo necesario, desde material para los alumnos como para los maestros, estoy cansado y tengo hambre, pero he comprado cerdo dulce así que me siento a comer, tengo un par de llamadas perdidas de mi hermano, le devuelvo la llamada, no era nada urgente, solo saludarme y saber cómo estoy, si supiera, pero obvio no le digo nada.

Son las 10 de la noche y me siento cansado, he adelantado trabajo, comprado cosas y estado en la calle, así que me pongo el pijama y me acuesto, leo un poco y apago todo para quedarme dormido.

Escucho un portazo que me despierta, veo la hora y son las 3 de la mañana, me cubro la cara con la sábana, no quiero ver a Yoongi y mucho menos hablarle.

A la mañana siguiente suena la alarma, la apago, me despabilo un poco en la cama y siento como Yoongi se despierta por el movimiento que hace la cama, rápidamente salgo de la cama y me meto a bañar, sé que quería acercarse a mí y es algo que no voy a permitir.