Ex Novio Posesivo | YoonMin | ADAPTACIÓN

TREINTAIDOS

Abrí los ojos lentamente, sintiéndome incomodo por la luz solar que atravesaba mi ventana. Observé mi habitación, las paredes son de color verde claro, las cortinas son blancas, y desde la ventana puedo observar un árbol por el que perfectamente puedo bajar hacia la planta de abajo y escaparme. Yoongi solía subir por ese árbol en nuestros primeros meses de novios. Maravillosos recuerdos, todo era color de rosa.

Respiraba con dificultad gracias a la gripe que me gane la noche anterior.

Había acordado salir con Yoongi todo el día. Sus padres accedieron a levantarle el castigo solo por ese día.

Supongo que fue porque me conocen a la perfección y saben que Yoongi no se metería en problemas estando conmigo, o al menos eso pensaban.

Me di una larga ducha. El agua caliente me ayudaba a relajar. Cuándo salí me puse unos jeans simples negros, una camisa blanca y con un sweter el cual llegaba a mis muslos, (Como a Yoongi le gustaba) El sweter era café claro. Arregle mi cabello y me maquille lo más poco que pude. Cuando termine de maquillarme me senté en la cama y me puse unas Botas Timberland.

Mi nuevo teléfono móvil vibro en la mesilla de noche. Lo tome inmediatamente y mire la pantalla.

| Nuevo Mensaje.

Hola Jimin, ¿Como amaneciste? Espero que muy bien. Veraz, hoy es mi cumpleaños numero 19, quisiera que vinieras y estuvieses un rato. No será nada del otro mundo, solo será una fiesta. Estaré esperando tu respuesta.

De: Jong Suk.

Me puse nervioso. A mi cabeza llegaron pensamientos de si tal vez yo le gustaba a Jong Suk. Eso no seria mas que un problema, no solo digo por Yoongi si no por la manera de pensar de Jong Suk. Es completamente diferente a la mía, es algo así como la de Taehyung. Por esa parte si estaba completamente agradecido de que Yoongi no pensara de esa manera.

-Yoongi esta esperando abajo.-mi padre abrió la puerta sorprendiéndome.

Suspire frustrado.

-Vale.-guarde mi teléfono móvil dentro de mi bolso. Mas tarde le respondería a Jong Suk.

-Espero que disfruten este día.-dijo mi padre.

Le miré mientras salía de la habitación. Me límite a asentir.

Me despedí de mi padre y salí de casa, caminé hacia el coche de Yoongi, me monté en el asiento del copiloto y suspire sin mirarle a los ojos. Estaba yendo casi obligado.

- ¿Que te pasa?-escuché su voz.

-Nada.-me coloqué el cinturón de seguridad. Agarro mi barbilla con brusquedad y me obligo a mirarlo.-Yoongi...No vamos a empezar.

Se inclinó hacia mí, sin soltar mi barbilla y plantó un corto beso en mis labios.

-Solo quería saludarte como debe ser.-me soltó, y volvió la mirada hacia adelante. Prendió el motor y comenzó a conducir.

Miraba por la ventana mientras Yoongi conducía. Estábamos alejándonos de nuestras casas. Yoongi conducía a una velocidad impresionante.

- ¿Como esta Taehyung?-pregunté, rompiendo con el silencio de minutos.

-Está descansando.-se encogió de hombros.-Supongo que bien.-agregó.

- ¿Para donde vamos?

-Ya veraz.-siguió conduciendo.

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Luego de cuarenta minutos de viaje, me di cuenta de que estábamos en la casa campestre de los padres de Yoongi. Él me la había mostrado en algunas fotos unos meses atrás. Era realmente hermosa, estaba rodeada por arboles verdes y grandes.

Nos bajamos del coche y entramos a la casa, todo estaba impecable, era un espacio muy amplio. Deje mi bolso en un sofá, y camine hacia un pequeño balcón, el cual dejaba observar un hermoso lago, pude ver varios patos en el agua. Más allá, pude ver una caballeriza y un kiosco de madera.

-Es hermoso ¿no?-susurró en mi odio, abrazándome por detrás con aquella fuerza que caracterizaba sus brazos.

-Si.-sonreí, girando mi rostro para verle.

Me miro con aquellos ojos marrones, haciéndome quedar sin aliento. Fue inclinándose poco a poco hacía mí, sin reacción. Además sabía que no podía ser malo, Yoongi básicamente me había amenazado, así que tenia que atenerme a sus condiciones, a lo que él quisiera. Gracias a dios era el hombre que amaba y no un aparecido.

Comenzó a besarme lentamente, con suavidad y cariño. Se sentía bien darle un beso. Fui girándome poco a poco hacía él, Yoongi con sus manos alrededor de mi cintura me apretó a su cuerpo mientras yo colocaba mis manos en su cuello.

No tenia idea de lo que estaba haciendo. Lo único que sabia era que me gustaba besarlo, y además no tenía posibilidades de rechazarlo, estábamos lejos de mi casa y no me convenía violentar a Yoongi.

Podía sentir mi corazón latir desesperadamente dentro de mi pecho mientras nos besábamos.

-Vamos a quedarnos aquí el fin de semana.-murmuró Yoongi en mis labios.

Abrí los ojos, encontrándome con los suyos. Me alejé, puedo decir que totalmente aterrada. El no me lo dijo. Ni siquiera traje ropa.

- ¿Estas de broma?-solté.

-No, Jimin-negó todavía con sus manos en mi cintura.-Vamos a quedarnos el fin de semana. Tu padre lo sabe, mis padres estuvieron de acuerdo, así que no hay problema.-habló como si nada.

- ¿Has contado conmigo?-la pregunta a salió de mi boca sin que pudiese detenerla.

-Tú estas de acuerdo conmigo.- acarició mi mejilla.- ¿Lo recuerdas? Ayer acordamos que todo volvería a la normalidad.

¿Normalidad? Yo jamas había dormido con Yoongi y menos fuera de la casa. Ni siquiera habíamos tenido intimidad. ¿Ahora viene a decirme que me toca quedarme con él por todo un fin de semana? Mi cuerpo estaba congelado.

-Yo-Yoongi...-trague saliva. Estaba mareado, mi corazón quería salirse de mi pecho.