Conozco Tus Secretos

"Enfermero"

Marinette suspiro profundo mientras se acomodaba en su cama, ya cansada de estar acostada.

Hace tres días que no iba al colegio ya que fingia estar enferma y sí seguía en ése encierro seguro que iba a enfermar de verdad.

Ella, Marinette Dupain-Cheng, la gran Ladybug, tenía miedo de "darle la cara" a Adrien el cual aún tenía su diario.

Y la madre de Chloe con la que habló, le dijo que en un mes iría a New York y la llevaría con ella para que aprenda más de moda y pueda explotar su talento al máximo, humillando a Gabriel Agreste que estuvo presente y nunca recibió tal alago de su amiga.

"La vigilo, señorita Dupain-Cheng."

Fueron las palabras del diseñador que en un futuro no muy lejano, podría dejar de ser el número 1.

La azabache se sentó en su cama para quitarse su camisa pero palidecio al ver a Adrien, sentado abajo, husmeando su baúl de futuros regalos.

¡¿Cuándo rayos llegó ése ninja a su casa?!

-Con que lo que leí en tu diario era verdad ¿los puedo abrir? Técnicamente son míos.

Dijo el rubio con total tranquilidad mientras Marinette se bajaba a gran velocidad, le quitaba el regaló que había agarrado y lo ponía en su baúl antes de volver a cerrarlo.

Suspiró profundo y se volteó a hacerle frente a Adrien por entrar sin avisar al dormitorio de una chica pero no pudo.

Sus mejillas se sonrojaron mientras sentía la frente de Adrien, quien se había puesto de pie, sobre la suya.

-Nop, no tienes nada. Estás fingiendo.

Aclaró el rubio con una sonrisa y ella lo alejó con sus manos mientras veía a otro lado, con vergüenza.

-N-no te quiero ver... Adrien... ya vete.

Ni en sus peores pesadilla creyó decirle alguna vez a Adrien que se vaya.

¡¿Por qué tenía que ser tan cobarde?!

El chico retrocedió negó con la cabeza, sin borrar su sonrisa burlona.

-Lo siento, pero no me puedo ir. Tus padres tuvieron que salir por unas horas y como yo estaba de cruce, me nombraron tu enfermero.

Aclaró mientras se volvía a acercar a ella, quedando a centímetros del rostro de la azabache.

La peliazul miró los labios de su "enfermero" y tragó duró.

Lo admitía, sí se había imaginado éso pero para muy en el futuro.

-T-tú mismo c-comprobaste que estoy fingiendo... a-así que no hace falta que t-te quedes.

Por segunda, no podía creer que lo estaba corriendo de su casa.

Adrien amplió su sonrisa y antes de que pueda decir algo, afuera se empezaron a oír grito y la clásica palabra de "entreguenme sus miraculous."

Marinette se alejó y se tocó la panza.

-¡Ah! Me duele la panza, debo ir al baño.

Se fue corriendo y el chico rió por lo bajo.

Sí antes creía que Marinette era divertida, ni mencionar ahora.

Miró el baúl con curiosidad y...

-¡Ni se te ocurra tocar algo por que te cortó la mano!

Gritó la chica, aspirante a quedar ronca mientras él suspiraba profundo.

Al menos ahora sabía como intimidar a Ladybug siendo Chat noir.

Plagg salió y lo miró con orgullo por ser "travieso".

-¡Plagg, las garras!