Oh, querida diversión

Acabemos...

Nos despedimos de la feliz familia mis amigos...

El corazón del peludo iba a mil, sus ojos estaban ligeramente dilatados y su pata se movía de arriba hacia abajo, ahí estaba, el amor de su vida, medio dormido, sosteniendo a su retoño. 

Una pequeña criatura de forma humana, piel nívea y unas pequeñas orejas albinas se removía en los brazos de Jack, sintiendo la tela que lo rodeaba, pidiendo con gestos que tenía hambre, obligando a Jack a sacar su pecho plano y darle un poco de su leche materna.

El australiano se acercó lentamente con los ojos cristalizados y miró sonriente al aturdido Jack, que poco a poco se recuperaba de la anestesia. 

-¿Niño o niña?- Solo se limitó a preguntar eso y sentarse a su lado sosteniendo su mano.

-Niña.- Ambos sabía que los genitales no tenían que ver con su sexualidad, pero estaban tan emocionados que las palabras eran lo de menos. 

Ya saciado el pequeño ser estiró sus manitas con expresión risueña para abrir sus pequeños ojos que miraban fijamente a ambos padres. Que gran sorpresa fue para Conejo que al abrir sus luceros, la niñita padecía de heterocromía. El ojo izquierdo de color verde esmeralda, como Bunny; y el derecho de color azúl oceáno como su ''Madre''. 

Jack miró con una sonrisa a su amante y le extendió a su hija para acunarla en sus suaves patas. Bunny la sostuvo encantado y nervioso, su pulso temblaba y cada vez que la niña le sonreía miraba a Jack con los ojos esperanzados, dándose cuenta que eso no era una muñeca que repartía North a los niños, no, esto era de verdad, para siempre.

-Esto es para siempre Jack...- Bajó sus orejas.

-Para siempre... Como una buena familia.- Sonrió somnoliento. 

5 años después...

Cuanto corría esa niña, no paraba, no tropezaba, solo saltaba y reía cansando a su madre de volar. Hasta que finalmente le tiró una bola de nieve y fue atrapada por su 'papi Jack'.

-¡Eso no vale!- Se quejó retirando la nieve de su pelo.- ¡Aún no he desarrollado mis poderes!- Reclamó haciendo un puchero. 

-Eso te pasa por cansar de correr a la persona que te dio la vida... Además, soy más viejo que tú, me debes hacer caso.-

La niña iba a reclamar pero Toothiana los llamó a comer.

-¡La comida está lista!- 

Los dos se acercaron y pudieron ver la escena familiar de Sandy y Pitch con su hijo de 1 año, Bunny preparando el postre y Toothiana ayudando a North a poner los platos. 

-Tío Pitch, ¿Qué tal está el primo Dazael?- La pequeña albina con mechones azules se acercó curiosa a su tío que le daba el biberón a su retoño.

-Está perfectamente.- Sonrió a la pequeña.- ¿Quieres cogerlo?-

-¡Sí, sí, sí!- Sus ojos se iluminaron y sostuvo a su pequeño primo en sus manos.

-Lo habéis hecho bien.- Premió North a Bunny y a Jack que ya estaban sentados.

-Esto no sería lo mismo sin el mejor abuelo del mundo.- Jack posó su cabeza sobre North.

Todos estaban felices, todos bien, ya no había problemas, estaba todo en orden.

Así son las cosas y así os las hemos contado...

Fin :)

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Nada que decir. Ten un buen día.