Zemo los quería separar. Pero la Guerra Civil no se llegaría a realizar.
A pesar de sus esfuerzos por mantener oculto a Bucky de los demás hasta que se lo platicara a Tony, Hydra y él volvían a meter sus narices en donde no les incumbía.
El darle alcance al que había dejado de ser el Soldado de Invierno, fue algo trabajoso. Al principio creyó que sería sencillo encontrar a su viejo amigo, lo conocía como la palma de su mano, habían crecido juntos desde niños, lucharon hombro con hombro en la Segunda Guerra Mundial y después vio a Bucky caer de la montaña, tras la explosión en el tren. Él por haber estado 70 años siendo un maldito cubo de hielo como le gustaba decirle Tony, no se enteró de que usaban a su amigo como una muñeca de trapo, tampoco le interesaron mucho los asuntos de su organización cuando despertó, pues había encontrado algo más atrayente.
Tal vez esa fue un pequeño descuido, ya que al saber del Soldado de Invierno, tuvo que hacer valer su antigua posición como líder, a base de unas cuantas demostraciones de su poder, recordaba que bastante sangre corrió por diferentes lugares. Que los noticieros se volvieron locos por más de un mes al enterarse de las desapariciones o al hallar a ciertos miembros importantes del gobierno no sólo de Estados Unidos, desmembrados, incendiados, mutilados y del mismo estilo. Todos los que hablaban sobre el tema calificaban las escenas como repulsivas, algo de lo que él difería totalmente, había sido bastante entretenido y des estresante el callarles para siempre la boca a esas basuras.
Luego llegó Ultrón, y supo que cierta locura ya estaba implantada en el sensual cuerpo de su novio, pasó lo del mago, el supuesto ataque de otros alienígenas y entonces, llegó el estúpido de Zemo.
Estuvo furioso por días pues con el deseo de Tony por querer un bebé, decidió hacer de lado otras cosas; entre ellas el platicarle al castaño sobre su amigo, y lo que éste hizo en 1991.
Degolló al senador Stern cuando por casualidad lo escuchó burlarse por el radical y extraño cambio de valores y moral que se veía en Tony. El muy...cerdo asqueroso se había atrevido a reírse de su esposo, sin importarle en lo más mínimo que alguien lo escuchara. Aunque ahora que lo recordaba, le había cortado la lengua lentamente antes de cortarle el cuello.
Más y más problemas se le acumularon encima, Tony por alguna razón estaba en su contra, entendía que quería poner a todos los Vengadores a salvo, pero las cosas, su propósito como Capitán Hydra tenía que salir a la luz, para que todo el mundo se enterara de los nuevos cambios. El país ya era corrupto antes de que cualquiera de ellos dos naciera, y si él podía llevarlo por el buen camino, conducir no solo a América a la grandeza, lo haría. ¡Pero no! Su amado y celoso esposo se puso a querer dialogar con toda la panda de descerebrados del gobierno y otros más, intentando llegar a un acuerdo; aunándole que no le había gustado mucho la noticia de que él a la primera señal de Bucky corrió en su auxilio.
Antes de que la situación empeorara, se disculpó de todas las formas posibles con Tony, y aun con ciertas reticencias, le habló sobre la verdad que no le dijo en varios años. Obviamente recibió una bofetada de parte del moreno; el empresario no le dejó dormir juntos y ni siquiera le dirigió la palabra por días.
Pero lo que Zemo no sabía era que su castaño y él eran inseparables. Más temprano de lo que él esperaba Tony lo perdonó, muy a su manera y eso provocó que las cosas cambiaran en un rápido parpadeo. Mientras sus amigos estaban de su lado para ayudar a Barnes, Rhodey se negó, Tony y él se dijeron mil y una cosas por bastante rato.
Pensó que Tony lograría hacer entender a su amigo, pero recibió una fuerte impresión cuando Tony ingresó a su torre, lleno de sangre, con visibles golpes y moretones, que evidenciaban una clara batalla.
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Lo que sea por Tony
General FictionExiste una dualidad dentro de Steve Rogers. Ambas personalidades se complementan. Puede que a veces una le gane a la otra, pero saben que su equilibrio se restaura cuando están con él. Él es por quien sacrificarían su vida, los dos lo aman, aún cuan...