Las obligaciones como esposo

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Steve era un tipo muy responsable, después de todo, su madre así lo había educado.
Seguía las leyes sociales, bueno siempre y cuando éstas no interfirieran con sus planes; caminaba por la cebra y volteaba a los dos lados antes de cruzar la calle.

Y en su casa, lavaba la ropa cada fin de semana, cocinaba exquisitos platillos que a los demás Vengadores les encantaban, y cumplía con sus misiones al pie de la letra, ya fueran éstas de un bando o del otro.
Sabía y estaba consciente, de que conforme una persona crecía y tenía puestos en la sociedad de alto rango e importancia, la carga sobre sus hombros, sería cada vez mayor.

Sin embargo, ahora que se encontraba casado, sus responsabilidades y prioridades cambiaban. Desde mucho antes, de contraer matrimonio y de siquiera proponérselo a Tony, tenía en cuenta que su futuro estaría lleno de peticiones casi "egoístas", caprichosas, y a cualquier hora del día.
Su obligación como el ahora esposo de Tony, era velar aún más por su bienestar, y de su salud tanto física como mental. Así como también, de complacerlo en todo lo que él quisiera, cuando lo quisiera.

Por eso, es que al principio, aquellas frases que antes eran espontáneas y ocurrían una vez cada cierto tiempo prolongado, ahora eran recurrentes; no sólo era eso, en algunos días podían ser varios los comentarios los que lo sacaran de quicio.

Fue hasta que hizo cuentas mentales, que cayó en cuenta. Tony estaba próximo a su celo. Y podía oler a kilómetros de distancia, la falta de supresores para quedar en cinta. Al principio, y con la primera respiración a su entorno, dentro del complejo de los Vengadores, se quedó pasmado. El tema de los hijos había sido tocado muy pocas veces, una porque, al ser héroes de tiempo completo, no podían darse el lujo de negarse a una misión; y en segunda a pesar de que Tony estaba al tanto de su otro yo, no lo decía abiertamente.

Por eso, fue que ante las insistencias de su marido, sucumbió a su muda petición autoritaria. ¿Tony quería un niño? Bien, él se lo daría.

Después de todo, el haría lo que sea por Tony.

La noche fue agitada. Llena de jadeos y nudos dolorosos y satisfactorios que lo llenaban de una adrenalina de lujuria pura. Para cuándo estuvieron contentos, el reloj de su mesita de noche del lado izquierdo, mostró en números rojos, las 5:00 en punto de la mañana.

No quiso confirmar si su omega estaba embarazado. Tenía la seguridad de que así era. Y si por el contrario, el olor de Tony no cambiaba, no lo dejaría salir de la habitación hasta que así fuera.
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Ésta sí que va con la primera historia. Espero les guste, los dejó con el suspenso del matrimonio Rogers-Stark y puede que el futuro integrante 😂😍.
Espero les guste, y si me dejan un comentario, con gusto los responderé ❤️.
¡No me había dado cuenta que estamos en la posición número 2 de Capitán Hydra! Wow. No tengo palabras.
Ciao

Lo que sea por TonyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora